La República Checa y la UNESCO

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Hasta 2010 la República Checa tiene el propósito de incluir en la lista de la UNESCO cinco monumentos: las casas renacentistas de Slavonice, la manufactura de papel en Velké Losiny, el sistema de estanques artificiales en la región e Trebon, el barrio judío y la basílica de San Procopio en Trebíc, así como las pintorescas formaciones rocosas del Paraíso Checo.

Según Michal Benes, represente checo ante la UNESCO, los expertos de dicha organización optaron por endurecer a inicios del nuevo siglo las medidas con el propósito de mantener el alto nivel de la institución . La UNESCO no aceptará más de 30 candidatos por año, dijo Benes.

La columna de la Santísima Trinidad en Olomouc,  foto: Miloš Turek
Los monumentos como, por ejemplo monasterios o iglesias barrocas, no tienen actualmente grandes posibilidades de ser inscritos en la lista, señaló Benes, atribuyendo grandes posibilidades a la villa Tugendhat, construida en 1930 en Brno por el arquitecto Ludwig Mies van der Rohe, así como los estanques de Trebon y la manufactura de papel de Velké Losiny.

Con diez monumentos inscritos en la lista del patrimonio de humanidad de la UNESCO, la República Checa ocupa el séptimo lugar en Europa. El último monumento checo, incluido el año pasado en la mencionada lista, es la columna barroca de la Santísima Trinidad, de la ciudad morava de Olomouc. El la lista figuran también, por ejemplo, los cascos históricos de las ciudades de Praga, Ceský Krumlov, Telc y Kutná hora.