La primera medida del nuevo Gobierno es subir el salario mínimo
El nuevo Gobierno liderado por Jiří Rusnok tomará como primera medida de calado el aumento del salario mínimo interprofesional, situado actualmente en unos 307 euros, hasta los 325 euros. El sueldo mínimo no había aumentado en Chequia desde 2007.
Después de un largo tira y afloja, la entonces ministra de Trabajo y Asuntos Sociales, Ludmila Müllerová, ofreció la cifra de compromiso de 19 euros, que sin embargo no llegó a materializarse. El nuevo Gobierno de Jiří Rusnok, en el poder desde la semana pasada, ha escogido precisamente este aumento del sueldo mínimo como primera medida de su gestión.
Se trata de una decisión por la que ya había abogado en su momento el presidente de la República, Miloš Zeman, y que además cuenta con la ventaja de poder ser aprobada por decreto, sin necesidad de pasar por un Parlamento en principio hostil a este nuevo gobierno tecnócrata.
El primer ministro, Jiří Rusnok, declaró al respecto que la medida solo puede aportar nuevos ingresos a las arcas del estado, al elevar automáticamente los sueldos oficiales. Por su parte, el nuevo ministro de Trabajo, František Koníček, trató de rebajar importancia a este primer paso del Gobierno.“Que alguien intente no revalorizar 300 euros durante siete años. Simplemente había que hacerlo. Tratan de hacer de esto un problema ideológico o un problema de capacidad de empleo, pero se trata realmente de una marginalidad económica”.
Otro tema al que ya se ha comenzado a dedicar el nuevo Ejecutivo es la participación del Ejército en la reparación de daños ocasionados por las riadas. En teoría la participación de las Fuerzas Armadas en estas tareas acaba el próximo lunes, por lo que se espera que el Gobierno alargue este plazo hasta fin de julio. Asimismo el ministro de Agricultura, Miroslav Toman, prepara un informa sobre los efectos de las inundaciones en las explotaciones agropecuarias, lo que debería ser la base para futuras ayudas.
Rusnok también tiene en la agenda la propuesta de Ley de Loterías, preparada a iniciativa del entonces ministro de Finanzas Miroslav Kalousek, que amplía las competencias de los municipios a la hora de regular los juegos de azar.