El incierto futuro del Gobierno del primer ministro checo Rusnok
Tras dos semanas en el poder, el Gobierno interino del primer ministro checo, Jiří Rusnok, lucha contra viento y marea para conseguir el voto de confianza de la Cámara de diputados. El fallo definitivo se conocerá dentro de quince días, pero por el momento todo indica que los diputados de las agrupaciones de la antigua coalición gubernamental le darán la espalda.
El presidente de la República, Miloš Zeman, se apresuró a nombrar un Gobierno interino, encabezado por el economista Jiří Rusnok, no obstante los antiguos partidos oficialistas aseguran que no darán su voto de confianza al nuevo Ejecutivo en la Cámara Baja.
El jefe del Despacho presidencial, Vratislav Mynář, dijo a la Televisión Checa (ČT) que en caso de que el Gobierno de Rusnok no pase, es posible que el mandatario pida garantías de respaldo antes de nombrar a un nuevo primer ministro.
“En caso de que sea necesaria la formación de un nuevo Gobierno, es muy probable que el presidente Zeman pida el respaldo por escrito de un mínimo de 101 diputados”.
El procedimiento exigido por la Constitución de la República indica que para que el Gobierno asuma funciones ha de contar con un voto de confianza de la Cámara Baja, esto significa como mínimo de la mitad más uno del total de los diputados.La correlación de fuerzas en la Cámara de diputados no favorece al primer ministro Rusnok, que sin el apoyo de los antiguos gobernantes no pasará la prueba de fuego.
La Carta Magna sostiene que en caso de fracaso, el presidente puede nombrar un nuevo Gobierno y que en caso de no triunfar el tercer y último intento estaría a cargo del presidente de la Cámara de diputados.
Los partidos de derecha nominaron en un principio a Miroslava Němcová en sustitución de Nečas y querían mantener intacto el antiguo Gobierno, proyecto rechazado por el presidente Zeman y la oposición.Fuentes presidenciales no descartan que eventualmente el mandatario encargue a Němcová la formación de un nuevo Gabinete, pero nadie se atreve a especular bajo qué condiciones.
El presidente Miloš Zeman mantuvo conversaciones con los líderes de todas las formaciones políticas representadas en el Parlamento y pidió apoyo para el primer ministro Rusnok y su Gobierno, pero todo dependerá del resultado de la votación en la Cámara de diputados dentro de dos semanas.