La presa de Fláje abre sus recintos interiores a los turistas
La administración de la cuenca del río Ohře, en Bohemia Noroccidental, abrió al público los interiores de la represa Fláje. Se trata de una obra excepcional a nivel de Chequia, por ser hueca por dentro.
El embalse de Fláje, situado en las cercanías de la ciudad de Most, en los Montes Metálicos (Krušné hory), es uno de los lugares predilectos de los turistas en la temporada veraniega. Desde hace poco, además del embalse, los interesados pueden visitar los interiores de la represa de Fláje, que estará abierta al público todo el año. Así informó a la Radio Checa Jan Svejkovský, portavoz de la Administración de la cuenca del río Ohře.
“El embalse se extiende en el lugar del antiguo pueblo de Fláje, cerca de la frontera con Sajonia. A raíz de la construcción de una represa en el lugar, el pueblo desapareció bajo el agua, pero su iglesia fue trasladada al cercano pueblo de Český Jiřetín”.
La represa de Fláje fue construida entre 1951 y 1963. Tiene una altura de 58,5 metros, 50 metros de ancho con una longitud de 459 metros en su parte superior. Como sostiene Svejkovský, figura en el Patrimonio Cultural Nacional.
“La represa es una obra excepcional por su estructura. No se trata de una simple represa de hormigón, se le llama la represa de los pilares, porque los bloques de hormigón que la conforman están vacíos por dentro y la obra se apoya en 19 pilares. Los espacios vacíos son enormes y se pueden comparar con las naves de las catedrales”.
Estas, digamos bóvedas, están abiertas al público en general y son muy buscadas por los amantes de la arquitectura, según recordó Jan Svejkovský.
“Los turistas quedarán fascinados con el enorme espacio del dique. En la República Checa solo existe una represa que permite la entrada del público a sus recintos interiores. Se trata de algo excepcional a nivel de Chequia y en Europa hay solo una represa semejante en Suiza, la de Lucendo, construida en 1947, que sirvió de ejemplo para la de Fláje”.
En el pasado, se podía circular en coche por la parte superior de la presa pero después de unas obras, entre 1998 y 1999, la superficie fue estrechada y se prohibió la circulación de vehículos.
La represa de Fláje, además de proteger la zona ante las inundaciones, es una fuente de agua potable para las ciudades de Most, Litvínov, Bílina, Duchcov y Teplice.
Bajo la presa se encuentra el canal de navegación de Fláje, construido en el siglo XVI, que tiene unos cinco kilómetros de longitud y termina con un salto de agua artificial de 75 metros de altura.