La hepatitis C prolifera en Chequia más de lo previsto
Más de 80.000 checos padecen de hepatitis C crónica, una enfermedad infecciosa que afecta principalmente al hígado. El alarmante número de afectados lo reveló un reciente estudio realizado por la Facultad Militar de Salud de la Universidad de Defensa de Hradec Králové.
“En base a los análisis de la sangre de una determinada cantidad de personas hemos descubierto que el número de infectados por la hepatitis C aumentó ocho veces desde el año 2001. El 1,67% de la población adulta tiene síntomas de haber tenido esa enfermedad, y el 0,9% padece hepatitis C crónica”.
En el estudio participó un número representativo de personas entre 18 y 90 años de edad. Figuraron entre ellas ciudadanos que llevan una vida normal, estudiantes, trabajadores y jubilados, así como un determinado grupo de drogadictos. Lo que sorprendió a los expertos fue que no sólo estos últimos llevaban dentro de su cuerpo el peligroso virus de la hepatitis C.
En base a los resultados del estudio, los especialistas llegaron a la conclusión de que unas 140.000 personas en Chequia han tenido hepatitis C, y aproximadamente unas 80.000 tienen hepatitis C crónica. Este tipo de hepatitis es el más extendido en el país y se transmite por la sangre o, excepcionalmente, de una madre embarazada infectada a su bebé. El profesor Chlíbek advierte que los síntomas de la enfermedad no son muy evidentes, por lo que muchas personas no saben que están contagiadas.”Una persona puede tener la hepatitis C varios años sin darse cuenta, sin tener ningún síntoma evidente. Puede sentir cansancio, dormir mal o tener una pérdida temporal de apetito que no obstante, puede atribuir al exceso de trabajo que tiene. Luego a esa persona le puede ser diagnosticada cirrosis de hígado, o incluso un cáncer de hígado. También por ello la hepatitis C es el motivo más frecuente de los trasplantes de hígado en la República Checa”.
Un considerable número de personas que han participado en el reciente estudio de la hepatitis C no sabían que estaban contagiadas. También por ello los especialistas están convencidos de que el número real de afectados es mucho mayor de lo que se sabe oficialmente.Los galenos insisten en la importancia de los chequeos médicos regulares cada dos años por lo menos, ya que éstos pueden descubrir a tiempo algún mal que afecta el cuerpo humano. Indican asimismo que los afectados no deberían desesperarse al enterarse de que estaban contagiados. Actualmente existen nuevos fármacos antivirales contra el virus de la hepatitis C que permiten acortar el tiempo del tratamiento, y cuyos efectos secundarios son mínimos en comparación con los que tenía el interferón inyectable que se usaba antes para combatir ese mal.