La “batalla por la leche” presionará a los ganaderos a exportar
Los ganaderos del país quieren hacer frente a la desfavorable situación en el mercado nacional. Una de las primeras medidas podría ser el aumento de la exportación, para reducir el aflujo de los productos lácteos extranjeros.
El problema es que el precio de venta de los productos lácteos checos es inferior a los costes de producción. El presidente de la Cámara Agraria, Jan Veleba, resaltó que en el futuro la desfavorable situación en el mercado checo obligará a los ganaderos del país a vender sus productos en el exterior.
“Hoy día no hay espacio para los productos lácteos checos en el extranjero, pero la situación cambiará en el futuro y yo temo que se produzca una fuga de la leche checa del país y que después las centrales lecheras carezcan de materia prima para la producción. Por eso me extraña esta política comercial”, indicó.
Los ganaderos se quejan de que las empresas de productos lácteos del país se esfuerzan por rebajar artificialmente el precio de la leche y así ponen en aprieto a los productores.
Veleba auguró que en caso de que la situación no mejore, los ganaderos tendrían que sacrificar gran parte de los animales.
Otro problema es que la leche importada cubre hoy día el 30 por ciento del consumo total del país, lo que reduce las ventas de la leche producida en la República Checa.
Por su parte, el ministro de Agricultura, Petr Gandalovič, indicó que la única cosa que se puede hacer en este caso es exhortar a los clientes checos a que compren leche producida en el país.
“La única cosa que podemos hacer es pedir a la gente que se informe de dónde proviene cada producto que van a comprar. Pero no disponemos de ningún medio legislativo para cambiar esta situación. Formamos parte del mercado común europeo, en el que no existen barreras, excepto las reglas veterinarias y de higiene”, recalcó el ministro.
Actualmente, la República Checa exporta una séptima parte de los siete millones de litros de leche producidos diariamente en el país. Por otro lado, según datos estadísticos, una tercera parte de los quesos vendidos en la República Checa proviene del exterior.