La Academia de Ciencias quiere estar más cerca de la sociedad

Jiří Drahoš, foto: Alžběta Švarcová

Los problemas de la vida cotidiana, los desafíos de la sociedad, la medicina y la energética. Estos son algunos de los temas a los que prestarán una mayor atención los científicos checos. La nueva estrategia de la Academia de Ciencias checa busca un mayor acercamiento a la sociedad.

 Jiří Drahoš,  foto: Alžběta Švarcová
Los científicos checos dedicarán más tiempo a la investigación de problemas y asuntos que afectan a la sociedad contemporánea. La determinación fue tomada por la Asamblea de la Academia de Ciencias, celebrada este martes en Praga.

El director del ente, Jiří Drahoš, sostuvo que los cambios aprobados por la Asamblea quedaron plasmados en el documento denominado ‘Estrategia 21’.

“La nueva estrategia busca poner los resultados de nuestras investigaciones al servicio de la sociedad actual. Trataremos de entrelazar el trabajo de nuestros centros de investigación en programas que ayuden a mejorar la calidad de vida. No faltarán estudios sobre ética, energética y sociología”.

Los científicos checos están convencidos de que la Academia de Ciencias puede representar en el futuro, además de su función como centro de investigaciones, un importante aporte económico para la nación.

Una de las prioridades de la Academia de Ciencias seguirá siendo el respaldo a los jóvenes talentos. En este campo esperan mantener o aún mejor incrementar los recursos disponibles.

Además de los problemas económicos, los científicos checos se enfrentan a otro problema que debilita sus actividades. Resulta que muchos científicos jóvenes optan por irse a trabajar a centros de investigación en el exterior.

Pavel Bělobrádek,  foto: archivo del Gobierno Checo
Muchas veces se sienten frustrados, porque en Chequia carecen de condiciones, infraestructuras, pero sobre todo presupuestos adecuados para sus investigaciones.

La Academia de Ciencias recibe un poco más de 160 millones de euros del Estado para su funcionamiento. El director Jiří Drahoš pide un aumento de al menos unos cinco millones de euros para mejorar el trabajo de la institución que dirige.

El vicepresidente del Gobierno, Pavel Bělobrádek, responsable de asuntos de innovación y ciencia, reconoció que al sector le faltan recursos, por lo que no descarta una inyección económica por parte del Estado en el futuro, además de un aporte de los fondos europeos y del sector privado.