José Cano analiza en Praga el alma del dinero
La nueva exposición 'El Alma del Dinero' ('Duše peněz') de la galería DOX de Praga indaga a través de diferentes manifestaciones acerca del papel de dinero en el mundo actual y las consecuencias del actual sistema financiero. La muestra cuenta también con participación hispana. Radio Praga tuvo la oportunidad de conversar con los artistas españoles José María Cano y Libia Castro sobre la concepción del mundo bancario en sus obras.
La exposición trata de profundizar asimismo en la problemática del actual sistema financiero, que por un lado sacó a millones de personas de la pobreza, y por otro es una amenaza, debido a la cada vez más profunda desigualdad material.
Billetes embellecidos con encáustica
Como si reflejaran su dominio al mundo, unos majestuosos billetes de gran formato llaman la atención nada más entrar en la de DOX. Los billetes de grandes divisas mundiales y un logo del rotativo Financial Times proceden del taller del polifacético artista español José María Cano. El ex integrante del grupo musical Mecano incorporó la temática del mundo financiero en sus obras en 2004 como consecuencia de su asombro por la importancia que la sociedad atribuía al dinero, así como por la fascinación de la gente por las personas adineradas.Al darse cuenta de que el dinero se iba convirtiendo de un recurso para conseguir las metas soñadas más bien en un fetiche, se le ocurrió que al menos podría embellecerlo.
“Quería convertirlos en algo orgánico, un jardín o una persona. Como sitio donde puedes pasear y donde te puedes meter. Visualmente son así, están llenos de colores y de detalles muy bonitos”.
La marca distintiva de la mayoría de sus obras es la llamada encuástica, una de las técnicas más antiguas, que consiste en pinceladas con cera caliente sobre lienzo, explica José Cano.
“En realidad es la técnica profesional más antigua profesional de todas. Las pinturas profesionales más antiguas que se conservan son estas de las cuevas como Altamira, que se pintaban con sangre y barro, y pinturas que se hicieron en Egipto durante el Imperio Romano, unos 200 años a. C. Cuando alguien moría, al enterrarlo hacían un retrato del rostro y lo ponían en la parte superior de la momia. Estas pinturas se conservan fantásticamente. La cera tiene una perdurabilidad extraordinaria”.
Billetes de las monedas británica y china desde lejos, coloridos ornamentos detalladamente elaborados desde cerca. Las imágenes de José Cano generan un doble efecto, según explica.
“Cuando algo es pequeño nuestro ojo genera una especie de colores al mirarlo. Entonces, yo los pinto de manera de cuando te alejas, no tengas la sensación de que es algo que se ha ampliado, sino que sigas teniendo la sensación de que aquello es algo originalmente pequeño. Cuando algo es pequeño, nuestro ojo genera este tipo de fascinación porque el tamaño de nuestro ojo respecto al tamaño de papel hace que vea de una forma irregular. Cuando te acercas, está lleno de colores y de cositas que no ves de lejos. Pero cuando te alejas, tienes la sensación de nuevo de que es un billete”.
De DOX a la Casa Blanca
No es la primera manifestación artística de José Maréa Cano en la galería DOX. De hecho, es uno de sus padrinos, ya que en 2008 la inauguró con la exposición 'Bienvenido al Capitalismo', dedicada un tema similiar: el mundo bancario y los personajes que mueven sus hilos. Uno de sus retratos, protagonizado por Barack Obama incluso se trasladó de la galería DOX a la Casa Blanca. En aquel entonces le llamó la atención al ex presidente checo, Václav Havel, que decidió regalárselo al presidente estadounidense durante su visita a la República Checa en 2009.“Nos hace ilusión poseer algo”
Además del mundo bancario, la violación de los derechos humanos o la prostitución son otros temas que el artista plasma de diferentes formas en sus pinturas. Según afirma, siempre se ha visto atraído por la idea de la posesión como un elemento que convierte el ser humano en lo que realmente es.“Es un concepto que no es real. Básicamente, solo tendría sentido en el antiguo Egipto cuando metían sus posesiones en las pirámides, en las tumbas. Pero aquí cuando nos morimos... En realidad, todo es alquilado. Si tú divides lo que te ha costado entre los meses que te quedan de vida, te sale el precio de alquiler que estás pagando por lo que has comprado. No poseemos nada. Pero nos hace la ilusión que poseemos algo, sea una casa o una persona. El concepto del matrimonio está basado en esto, en la posibilidad de poseer una persona”.
La comodificación se ha apoderado de la vida social y todas las acciones, incluso las artísticas, se han convertido en una mercancía. No siempre ha sido así, apunta José Cano.“Es una pena. Ha sido un proceso de materialización progresiva del ser humano y ahora todo es el dinero. Además, la gente lo entiende así. Cuando hay un Gobierno, lo importante es la economía. Lo demás da un poco igual”.
Respecto al actual panorama artístico en España, José lo señala de prometedor, pero de las condiciones laborales no dice lo mismo.
“En España hay buenos artistas, pero como no hay coleccionistas, los pobres se van viniendo abajo. Si no te ganas la vida con el arte, es muy difícil seguir trabajando en él. Y para los españoles es muy difícil ganarse la vida con el arte”.
“La música mejor como entretenimiento que como profesión”
José María Cano se ha visto atraído por las artes plásticas desde su infancia, pero en la fama entró como músico. Tras la ruptura de la banda de pop Mecano en 1998, la vida le recondujo al mundo pictórico. Los conciertos con el grupo Mecano no los echa de menos, pero la música no la dejó del todo, apunta.
“Este verano por ejemplo Plácido Domingo cantó en Málaga y yo estuve dirigiendo la orquesta de un tema mío. Mi hijo también es músico, cuando toca, yo canto con él. La música como entretenimiento es maravillosa, mucho mejor que como profesión”.
La (anti) héroe de Libia Castro y Ólafur Ólafsson
Los proyectos artísticos de la española Libia Castro y el islandés Ólafur Ólafsson se enmarcan en asuntos sociales y políticos. El dúo, cuya base artística se mueve entre Berlin y Rotterdam, creó exclusivamente para la exposición 'El Alma del Dinero' un vídeo, protagonizado por una activista de un mundo imaginario. En él figura como una heroína por un lado, y antiheroína por otro, explicó a Radio Praga Libia Castro.
“Es un monólogo que está entre lo que podría ser un manifiesto, una súplica. El tema es una reflexión sobre lo que ha pasado desde el 2008 hasta hoy en día. Cómo ha afectado la crisis financiera a la vida de la gente y la economía real, y cómo a partir de eso se han creado muchos movimientos cívicos y políticos. Una aglomeración de esta experiencia del cuestionar la democracia hoy en día, del imaginar cómo podría ser más democrática, del cuestionar el sistema financiero, y las polaridades. Cada vez más gente tiene más y más gente tiene menos”.La protagonista de la obra presenta dos guiones del futuro. Uno más distópico, que describe un mundo despótico manejado por los políticos y los intereses del sistema financiero. Otro parte de una idea utópica, en la que el poder pertenece a un movimiento enviromental que va poniendo coto a la pobreza y lucha por la paz mundial.
La alternativa de la imagen utópica no es imposible de realizar, apunta la artista.
“Creo que es una realidad posible. Pero para esto la gente se tiene que mojar mucho. Tiene que responsabilizarse de su propio papel en lo que podría ser una democracia más democrática y donde el control del dinero se llevaría de otra manera”.
Libia Castro y Ólafur Ólafsson no exponen en la galería DOX por primera vez. En 2014 presentaron en el marco de la exposición 'Mody Demokracie' un proyecto dedicado al proceso revolucionario, surgido tras la quiebra de los bancos en Islandia, que desembocó en la enmienda de la nueva Constitución del país, aproxima Libia Castro.“Era una instalación de vídeo, donde colaboramos con músicos y con una compositora islandesa. Pusimos la música a la Contitución de la República Islandesa. Queríamos hacer un vídeo y una pieza musical donde nos apropiábamos del texto de la Constitución y lo transformábamos en una pieza musical. Al transformar la forma y el medio, reflexionas sobre el contenido de otra manera, quizá no tan peada y aburrida como leerse la Constitución”.
Cambios sociales “invisibles” y paraísos fiscales
Una simbólica expresión de los cambios sociales, de los que no se para de hablar pero cuyo impacto es mínimo la encarna en la galería DOX una guillotina de espejos, elaborada en el taller del artista peruano Jota Castro. El dúo artístico formado por la española Núria Güell y el cubano Levi Orta llevó a Praga un proyecto dedicado a la problemática de los paraísos fiscales. La exposición 'El Alma de Dinero' ofrece asimismo una mirada a los aspectos más positivos del mundo de finanzas como cambio de la actual perspectiva por medio de varios experimentos e iniciativas.
La muestra permanecerá abierta en la galería DOX hasta el 6 de junio e incluirá seminarios, talleres, proyecciones de películes y debates centrados en temas como la desiguladad social, la diferencia de ingresos y tráfico de órganos, entre otros.