Hitler y Stalin: ciudadanos de honor en algunos municipios checos
La economía checa podría evitar la recesión gracias al crecimiento de la producción industrial, la energía eólica no es bienvenida en el país y famosos dictadores figuran entre los ciudadanos de honor de algunos municipios checos. Estos son algunos de los temas que les ofreceremos en el resumen de la prensa este martes.
Esto se debe sobre todo al crecimiento en el sector automovilístico y la venta en el extranjero de los coches fabricados en el país. Creció también el sector de construcción que aumentó sus ventas en el último trimestre del año pasado gracias a las buenas condiciones meteorológicas en diciembre que permitieron construir más de lo esperado.
Los expertos de economía por lo general prevén un crecimiento cero en la producción industrial y algunos suponen una disminución hasta un 3% en 2012, concluye Mladá Fronta Dnes.
El diario Hospodářské Noviny centra su atención en la energía eólica que se produce en el país. En comparación con los otros países de la Unión Europea, la producción de este tipo de energía en la República Checa es mínima. Mientras las centrales eólicas de Alemania y España producen alrededor de veinte y treinta mil megavatios al año, respectivamente, las turbinas de viento checas llegan a tan sólo 270 megavatios. Además, en 2011 se construyó solo una turbina en todo el país, informa el periódico.
Aunque la energía eólica resulta mucho más barata que la solar, los checos se muestran en contra de las estructuras de las centrales eólicas que según muchos afean el paisaje. No obstante, la República Checa prometió a la Unión Europea producir 750 megavatios en el año 2020 y va a tener que cumplir con este plan construyendo más centrales en los próximos años.
Según el periódico, los nombres de Hitler o de Stalin pueden ser borrados de los registros, sin embargo no queda claro si la ciudadanía de honor la puede obtener una persona que ya no está viva como es el caso de Havel. Los abogados entrevistados por Právo coincidieron en que al morir cada persona pierde su estatuto de ciudadano y las leyes checas no cuentan con la posibilidad de otorgar la ciudadanía post-mortem.
Para concluir Lidové Noviny avisa sobre la semana de protestas contra la reforma de la educación superior que van a organizar los estudiantes universitarios checos desde el 27 de febrero hasta el 2 de marzo.
Conferencias, debates pero también piezas de teatro y conciertos tendrán lugar tanto en la capital como en las otras ciudades universitarias, señala el diario. En Brno los estudiantes quieren tomar su alma máter en la noche para discutir la reforma sin perturbar a la enseñanza durante el día, en la ciudad de Pilsen los estudiantes montarán puestos informativos en las calles. El Gobierno debatirá sobre la reforma de la educación superior a finales de febrero.
