Gobierno checo sobrevive quinta moción de censura

Petr Nečas, foto: ČTK

El Gobierno de Petr Nečas sobrevivió una nueva embestida. La oposición no consiguió los 101 votos necesarios para imponer la moción de censura y el Gabinete seguirá gobernando.

Petr Nečas,  foto: ČTK
Se dice que a la tercera va la vencida, pero ese no es el caso del Gobierno de Petr Nečas. A pesar de sufrir un sinfín de crisis internas, escándalos y constantes ataques de la oposición, el Ejecutivo salió airoso de la ya quinta moción de censura.

Petr Nečas superó así a su antecesor, Mirek Topolánek que no fue capaz de superar la quinta moción de censura de la oposición y se desplomó en medio de la presidencia checa de la Unión Europea.

La oposición reunió tan sólo 92 votos este jueves, pero para tumbar al Gobierno se necesitan al menos 101 votos. La oposición pidió una moción de censura contra el Gobierno porque respaldó y facilitó la entrada en vigencia de la polémica amnistía presidencial.

Durante los debates en la Cámara Baja, el primer ministro Nečas no ocultó su malestar y criticó a la oposición por buscar siempre un pretexto para promover mociones de censura.

Václav Klaus,  foto: ČTK
“La amnistía del presidente de la República simplemente ha sido utilizada como pretexto para promover otra moción de censura contra el Gobierno”, se defendió el primer ministro.

La sesión de la Cámara de diputados, en la que la moción de censura fue el punto principal, se convirtió en una especie de crónica con resultado anunciado.

De antemano se sabía que la oposición no contaba con los votos necesarios y que el espectáculo se reduciría a horas de ejercicios de retórica política y así fue.

No obstante, hubo una sorpresa. Karel Schwarzenberg, vice primer ministro, líder del gubernamental partido TOP 09, ministro de Relaciones Exteriores y candidato a la presidencia de la República abandonó la sesión para demostrar su desacuerdo con la amnistía presidencial.

Karel Schwarzenberg,  foto: ČTK
El jefe de la bancada parlamentaria de TOP 09, Petr Gazdík, dijo en el pleno que dicha formación consideraba que la amnistía era un error, tal y como la aprobaron el presidente y el primer ministro.

Por su parte, Karel Schwarzenberg rectificó sus palabras anteriores de apoyo a la medida de gracia. “Se trata de un suceso que ha sacudido a la sociedad y comprendo el malestar de los ciudadanos”, indicó.

La oposición y círculos políticos critican la amnistía presidencial por el hecho de haber favorecido a muchas personas sospechosas de corrupción y de delitos financieros.

El malestar generalizado de la población fue el impulso que utilizó la oposición para proponer su moción de censura contra el Gobierno, porque el beneplácito de éste fue indispensable para la que medida de gracia entrara en vigencia.