F.X.Dusek mantuvo durante cinco años al hijo de Mozart

Josefina Dusková

A Frantisek Xaver Dusek se le conoce principalmente como marido de la cantante Josefina Dusková, amiga de Wolfgang Amadeus Mozart, y como amable anfitrión del famoso compositor austríaco durante sus estancias en Praga. Dusek, relevante compositor él mismo, que abarcó casi todos los géneros musicales, y un virtuoso en los instrumentos de teclado, quedó injustamente eclipsado por su esposa, la mayor cantante checa de la segunda mitad del siglo XVIII.

Bertramka
A diferencia de sus contemporáneos, los compositores Benda o Brixi, Frantisek Xaver Dusek no procedía de una familia tradicionalmente musical. Nacido en 1731 en un pueblo de Bohemia Oriental, sus padres eran súbditos del conde Jan Karel Spork, en quien el talentoso Frantisek encontró un mecenas. El conde financió sus estudios en el colegio jesuita de la capital de Bohemia Oriental, Hradec Králové, para que el joven pudiera ser un día sacerdote.

Sin embargo, Dusek no concluyó sus estudios. Se lo impidió un accidente, una caída, que lo dejaría para siempre cojo. Los médicos que lo atendieron descartaron que pudiera seguir estudiando.

Cuando se recuperó, Dusek se marchó a Praga. Tras malograrse su carrera de sacerdote, el conde Spork lo mandó a estudiar música con Frantisek Václav Habermann, también conocido como el "Haendel checo".

Dusek, que estaba interesado principalmente en aprender a tocar el clavicémbalo y llegar a ser virtuoso en ese instrumento, echaba de menos en Praga una enseñanza superior que le permitiera mejorar su técnica de interpretación.

El conde Spork lo envió en 1751 a Viena. Y como el aprendizaje del clavicémbalo suponía estudiar también la composición, Dusek decidió aprender a componer.

Dusek estudió el clavicémbalo con Georg Christoph Wagenseil, maestro de renombre europeo. Aprendió también a tocar brillantemente el instrumento en boga en aquella época, el pianoforte. Y al poco tiempo se abrieron ante el joven artista las puertas de los palacios y de las salas de concierto.

En 1761, cuando tenía 30 años, el músico se instaló en Praga. Se alojó en la casa del Sol Negro, en la calle Celetná. En la misma casa vivía la viuda de un farmacéutico, la señora Hambacher, con su hermosa hija Josefina, una cantante de talento. De inmediato Dusek comenzó a darle a la joven clases de piano.

En octubre de 1776 Frantisek Xaver Dusek contrajo matrimonio con Josefina, casi 22 años más joven que él. Al año siguiente, el matrimonio viajó a Salzburgo, donde vivía el abuelo de la cantante, el ex alcalde salzburgués, Johann Anton Weiser. En las veladas musicales en la casa solían actuar Leopold Mozart y su hijo, Wolfgang Amadeus.

Josefina y su canto causaron una profunda impresión en el joven Mozart que en adelante sería admirador y amigo de la cantante checa. El matrimonio Dusek ganaría la inmortalidad como amigos y anfitriones de Mozart durante las estancias del compositor en Praga.

De esa manera fueron quedando en la sombra los indiscutibles méritos de Frantisek Xaver Dusek en el campo musical. Su obra de compositor es extensa e incluye todas las formas musicales, con excepción de la ópera. Compuso 36 sinfonías, 4 conciertos para piano, cuartetos, piezas para instrumentos de cuerda y de viento y composiciones sacras.

Dusek fue el primer virtuoso checo del piano y fundador también de la primera escuela de piano nacional, formando a varios excelentes pianistas. Fue una de las figuras más influyentes y populares de su época en la vida artística de Praga.

De la generosidad de Dusek da fe el hecho de que después de la muerte de Mozart, sucedida en 1791, el músico checo mantuvo durante cinco años en Praga al hijo de Mozart, Karl, a quien enseñó música. Y en 1797 el matrimonio Dusek hospedó medio año a otro hijo del compositor austríaco, llamado Wolfgang como su padre.