Exilio cubano podría ayudar a la RCh con visados de EE.UU.

William Cabaniss y Jiri Paroubek (Foto: CTK)

La posibilidad de que los ciudadanos checos viajen en un futuro próximo a EE.UU. sólo con su pasaporte no es real, sostuvo el embajador estadounidense en la República Checa, William Cabaniss, este lunes. Praga seguirá insistiendo en la eliminación de la obligación de visados. Sus esfuerzos se dirigirán ahora al Congreso de EE.UU.

William Cabaniss y Jiri Paroubek  (Foto: CTK)
La visita de este lunes del primer ministro checo, Jirí Paroubek, al departamento consular de la Embajada estadounidense en Praga no ha aportado una promesa de eliminación de la obligación de visados para los ciudadanos checos. Paroubek confía, sin embargo, en que las autoridades estadounidenses cambiarán de postura, y no baraja la posibilidad de adoptar medidas recíprocas para no perjudicar la economía checa.

"Nuestro objetivo es atraer a la República Checa cada vez más turistas norteamericanos, que junto con los turistas japoneses, gastan la mayor cantidad de dinero. Lo pagarían los que desarrollan actividades empresariales en el turismo y los que están relacionados con ellos. Hay que buscar otra solución, por ejemplo, en debates similares al de hoy", dijo Paroubek.

Cola de solicitantes de visados  (Foto: CTK)
El primer ministro admitió que no está informado sobre la iniciativa del embajador checo en Washington, Petr Kolár, quien se esforzará en propugnar la eliminación de visados a través de los miembros del Congreso de EE.UU., políticos y lobbys locales.

"Mucha gente en EE.UU. califica de irrazonable mantener la asimetría de visados entre la República Checa y EE.UU. La República Checa es considerada un aliado muy importante de EE.UU. no sólo en el marco de Europa, sino también desde el punto de vista global, que debería tener una posición igual a la de algunos viejos países miembros de la Unión Europea. Nos apoyan compatriotas checos residentes en EE.UU., grupos influyentes judíos y cubanos, así como instituciones no gubernamentales", indicó Kolár.

La política de visados de los EE.UU. es objeto de crítica en la República Checa desde hace varios años. Los ciudadanos checos pagan por los trámites 2 500 coronas, unos 83 euros, a pesar de que no siempre obtienen el visado. Una de las condiciones para eliminar los visados es que el porcentaje de solicitudes rechazadas no exceda el tres por ciento. Según los diplomáticos estadounidenses, anualmente no se otorga el visado al diez por ciento de los solicitantes checos.