En Suchdol diseñan pesebre entre todos

Foto: Martina Schneibergová

Al siglo XVI se remonta en las tierras checas la tradición de construcción de pesebres en el tiempo de Adviento. En los umbrales del siglo XXI esa costumbre no pierde popularidad, según se puede comprobar estos días en el barrio capitalino de Suchdol.

Foto: Martina Schneibergová
La Sagrada Familia a la que se acercan los Reyes Magos rodeados de centenares de otras figuras más grandes o más pequeñas de arcilla ocupan el escenario frente al Ayuntamiento de Suchdol. Cada año la escena que recuerda el nacimiento del Niño Jesús es un poco diferente. El alcalde de Suchdol, Petr Hejl, explica por qué.

“Esta tradición se estableció hace siete años. Lo extraordinario de este pesebre es el hecho de que está conformado por figuras que fabrican niños en sus escuelas, así como otros ciudadanos de Suchdol a lo largo de todo el año. Al comienzo del Adviento las instalan en la plaza central de nuestro barrio donde el nacimiento permanecerá hasta principios de enero”.

La pintora Magdalena Vovsová es una de las autoras de la idea de invitar a los ciudadanos de Suchdol a crear un pesebre en común. Lo más complicado resultó encontrar un lugar para la instalación del belén. Para su construcción usaron los restos de un viejo puente, según cuenta la artista.

Alcalde de Suchdol,  Petr Hejl
“Hace ocho años derrumbaron en Dobřichovice, una ciudad a unos 40 kilómetros de Praga, un puente del siglo XIX. Conseguimos los bloques de piedra arenisca y granito de los pilares del puente, que ahora forman el núcleo de nuestro nacimiento. Más tarde recibimos soportes de roble de los bosques de Brdy”.

Cada uno de los habitantes de Suchdol puede modelar de arcilla su figurita. La edad de los creadores aficionados varía de 2 a 82 años. Este año desfilan en la plaza local 480 figuras.

En Suchdol se han inspirado entretanto otros municipios que empezaron a construir su pesebre público. Y no sólo en la República Checa. Con algunas de sus figuritas Suchdol obsequió incluso a su aldea hermanada en Italia.

Foto: Martina Schneibergová