El Viktoria Pilsen se enfrentará a Barcelona, Bayern de Múnich e Inter de Milán en la Champions League
El Viktoria Pilsen recibió con auténtica euforia el resultado del sorteo para la Liga de Campeones, en el que ha quedado encuadrada en el grupo de la muerte. Hace solo un año, el club cervecero estaba casi en bancarrota. Otro equipo checo, el Slovácko, de la pequeña Uherské Hradiště, vive su momento más dulce tras clasificarse para la Conference League, su primera competición europea.
El sorteo celebrado este jueves en Estambul difícilmente podía haber deparado rivales más difíciles para el humilde Viktoria Pilsen, que tuvo que sudar su clasificación hasta el último minuto del partido de este martes contra el Qarabağ azerí.
El Bayern de Múnich, total dominador de la liga alemana, es siempre uno de los favoritos para llevarse cualquier torneo que dispute y, después de las sorprendentes incorporaciones de este verano, Lewandowski incluido, el Barcelona también lo es. Pero el Inter de Milán, actual subcampeón de la liga italiana, promete que la clasificación para octavos de final, a la que pasarán los dos primeros, probablemente costará más de un infarto.
Nadie en Pilsen piensa que su equipo pueda entrar en la lucha, pero el Viktoria sí que podría resultar decisivo en su desenlace, ya que cualquiera de los tres favoritos que pierda algún punto en Chequia, tendría muchas papeletas para quedar sentenciado.
Jugar contra estos tres históricos europeos es precisamente el premio que ahora toca disfrutar, como contó a la Radio Checa el exjugador y ahora segundo entrenador del Viktoria Pilsen, Pavel Horváth.
“Por supuesto, al imaginarnos en los estadios más bonitos que hay ahora en Europa, como son los del Barcelona, el Bayern y el Inter, está claro que nos esperan muchos momentos bonitos que recordaremos”.
Pero el premio no es solo ese. Hace solo un año en Pilsen temían por el futuro del club. A pesar de haber sido el equipo de referencia de la pasada década, con cinco títulos de liga y tres participaciones en la Champions, no quedaba casi una corona en sus cuentas después de tres años sin jugar competiciones europeas ni vender jugadores. El propietario, Adolf Šádek, intentó vender el club pero no apareció ningún interesado. Al final, la solución a corto plazo que eligió fue adquirir una importante deuda que podría haber comprometido aún más el futuro de la centenaria institución, pero que, especialmente después del sorteo de este jueves, no tendrá problema en saldar. Tres de los equipos más importantes del mundo pasarán por Praga, ciudad donde el Pilsen juega sus grandes partidos europeos. Ver a Lewandowski, Ansu Fati, Pedri, Lukaku, Mané, Neuer o Müller será una oportunidad que muchos no estarán dispuestos a dejar pasar y se espera que no quede ni una entrada por vender. En total, entre la propia clasificación, derechos de televisión y la venta de entradas, el Pilsen embolsará más de 20 millones de euros. Por cada punto que logre arañar en la competición, la cifra irá jugosamente aumentando.
Volviendo al aspecto puramente deportivo, para algunos jugadores se tratará de uno de los momentos más especiales de su vida, como, por ejemplo, el centrocampista Jan Sýkora, declarado barcelonista.
Para algunos jugadores se tratará de uno de los momentos más especiales de su vida, como, por ejemplo, el centrocampista Jan Sýkora, declarado barcelonista.
“No he visto ningún partido en el Camp Nou, pero sí que he hecho la visita del estadio como turista. Al Barcelona lo sigo desde los cuatro años. Lo único que me da un poco de pena es que ya no esté Messi, pero aun así, es el equipo que más tengo en el corazón”.
La clasificación del Viktoria Pilsen para la Champions League, la cuarta de su historia, también tiene un significado muy especial para el entrenador Michal Bílek, como confesó a la Radio Checa.
“Debo decir que después de entrenar a la selección no viví momentos muy buenos. Llegó un momento en el que no sabía si tenía sentido seguir entrenando con esa atmósfera negativa que había en mi contra y que me afectaba”.
Clasificación histórica para el Slovácko a la Conference League
Esta semana también ha sido memorable para el Slovácko, equipo de la ciudad de Uherské Hradiště, de tan solo 25 000 habitantes. Tras quedar cuartos en la pasada liga, superaron todas las rondas previas, la última endosando un 4-0 global al AIK Estocolmo, hasta clasificarse para la primera competición europea de su historia, la Conference League.
El entrenador Martin Svědík no podía esconder su satisfacción por los resultados del trabajo de años en la ciudad morava.
“Estoy muy orgulloso de lo que está consiguiendo el club, especialmente en los dos últimos años. Nos habíamos puesto un objetivo, que era precisamente la clasificación para la fase de grupos de la Conference League. Es maravilloso para esta pequeña ciudad y para este equipo familiar haberlo conseguido. Estoy muy orgulloso”.
También el Slavia de Praga disputará la Conference League, pero para el gran favorito del campeonato checo, la clasificación en sí para la tercera liga europea en importancia, no puede suponer una alegría semejante a la del Slovácko. Aun así, por cómo se produjo el pase, sí que lo fue, porque no fue hasta el descuento de la segunda mitad de la prórroga cuando logró el gol de la clasificación este jueves contra el Raków Częstochowa polaco, que había llegado a Praga con una ventaja en el marcador de 2-1.
A estos tres equipos paseándose por Europa tendrán que mirar desde casa una vez más jugadores y aficionados del Sparta, rey del fútbol checo no hace tanto, y que desde hace demasiados años parece no levantar cabeza presidido por Daniel Křetínský, por mucho que sea uno de los hombres más ricos del país.
El calendario para el Viktoria Pilsen en la Liga de Campeones se conocerá probablemente este sábado. Mientras que será este viernes cuando el Slavia de Praga y Slovácko sepan cuáles serán sus rivales en la Liga Conferencia.