El poder adquisitivo crece junto con el PIB y una firme corona checa
La economía checa ha estado sobrepasando a sus vecinos centroeuropeos y se espera que alcance un hito sorprendente el próximo año, cuando el PIB per cápita llegue al 85% promedio de la eurozona.
De acuerdo con un nuevo estudio sobre el poder adquisitivo de 42 países, en términos de ingresos disponibles, la República Checa está apenas por encima del promedio ocupando el puesto número 23 o aproximadamente un tercio por debajo del promedio de la eurozona en el 2018.
Sin embargo, entre los países del antiguo Bloque del Este, Chequia ocupa el tercer lugar en la clasificación general, por detrás de Eslovenia y Estonia, habiendo superado a Eslovaquia y Lituania este año. El poder adquisitivo per cápita checo también sobrepasa al de Polonia y Hungría.
El continuo crecimiento del PIB no es el único factor detrás de la progresión del poder adquisitivo. Este también proviene del fortalecimiento de la corona checa frente al euro desde que el Banco Central cesara su intervención monetaria en abril. Pero con este aumento, también suben los precios en ciertas áreas. Así lo indica Pavel Mikoška, vicepresidente de la Unión de Turismo y Comercio de la República Checa.
“Esto básicamente refleja la situación del mercado, donde los dueños de negocios y productores sienten que existe un poder adquisitivo y por lo tanto, de una u otra forma pueden compensar sus propios costos. En el pasado, las empresas tenían que compensar el tipo de cambio desfavorable de las importaciones, ahora intuyen que pueden moverse en una dirección distinta”.Ajustado por la inflación, el promedio del salario mensual bruto en la República Checa se incrementó en un 6.2% en el segundo trimestre del año, a un poco menos de 1 200 euros. Mientras tanto, el índice de desempleo checo se encuentra en el nivel más bajo en 22 años, con menos del 3%, y muchos, especialmente los recién graduados, nunca habían podido encontrar trabajo tan fácil, dice Richard Hindls, antiguo rector de la Universidad de Economía en Praga.
“De hecho, hemos alcanzado el umbral del pleno empleo. Más o menos cualquiera que quiere trabajar puede encontrar empleo. Esto no es una ocurrencia común y la República Checa es quizás el mejor país en este punto en Europa. Sin embargo, condiciones externas pueden tener un gran impacto en la economía checa, la cual es pequeña y depende en gran medida de la evolución de otros países y del precio de las materias primas”.
Dejando las amenazas externas de lado, muchos consumidores checos están menos preocupados en ahorrar dinero y están dispuestos a pagar más por bienes de consumo de mejor calidad. Pero no todo es color de rosa cuando se habla de una de las inversiones más importantes en la vida de una persona, su propia vivienda.
Los precios de los inmuebles en Chequia son los más altos en la Unión Europea en comparación con los salarios. El precio de una propiedad para una familia pequeña supera 11 veces el ingreso promedio anual.
Cifras reveladas por el Ministerio de Finanzas muestran que el nivel económico relativo de la República Checa deberá alcanzar gradualmente el 85% del promedio de los países de la eurozona en el 2019. Por otro lado, el poder adquisitivo deberá subir del 66% al 71% el próximo año.