El comisario del Consejo de Europa se familiarizó en la RCh con el estado de los DD. HH.
Conocer "in situ" el estado de los derechos humanos fue el objetivo de la visita del comisario del Consejo de Europa, Alvaro Gil Robles, a la República Checa. Además de deliberar con representantes del Estado checo y organizaciones no gubernamentales, el comisario visitó también varios campos de refugiados.
"Son organizaciones combativas, pero al mismo tiempo muy responsables, que saben los problemas, los conocen y buscan las soluciones. Es decir, no se limitan solamente a la denuncia por la denuncia, sino que ponen encima de la mesa alternativas, sugieren soluciones. Y yo creo que eso es enormemente positivo porque significa que la sociedad checa es una sociedad madura, capaz de mirar de frente los problemas y saber cuándo hay que superar solamente la crítica para trabajar también con las autoridades en la resolución de los problemas".
El comisario del Consejo de Europa para los Derechos Humanos destacó que una de las mayores quejas que recibió en la República Checa se relaciona con el funcionamiento de su sistema judicial.
"... en el sentido de que es una justicia muy lenta. Son años para obtener una resolución judicial. Y eso naturalmente hace que el ciudadano piense que no tiene acceso a la justicia fácilmente, que tarda mucho. Y cuando la justicia es lenta es que no hay justicia, es una denegación de justicia. Por eso hay tantos procesos también en Estrasburgo y hay que evitar esto".
Alvaro Gil Robles señaló que al igual que en los demás países europeos, en la República Checa existen problemas respecto a los Derechos Humanos.
"... desde los problemas del funcionamiento de la Policía, la situación de la etnia gitana, con sentimiento de discriminación, la educación, étc, la justicia que acabamos de verlo, el tráfico de seres humanos, mujeres y niños sometidos a acciones mafiosas que hay que luchar contra ellas, no hay que consentirlas. En fin, la violencia, las familias con víctimas, hay que protegerlas ante esta violencia familiar. Claro que hay problemas con los derechos humanos en la República Checa, hay muchos, como en todos los países que están en pleno desarrollo".
Entre los años 1988 y 1993, Alvaro Gil Robles desempeñó el cargo de Defensor del Pueblo en España. En 1999 fue nombrado comisario del Consejo de Europa para los Derechos Humanos.
