Chequia quiere que la UE mantenga Radio Free Europe tras el cierre anunciado por Donald Trump
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este fin de semana el fin de la financiación para medios como la Voz de América o Radio Free Europe/Radio Liberty, que emite desde Praga a países como Rusia información vetada por Putin y otros regímenes autoritarios. Praga propone este lunes en Bruselas que la UE se haga cargo de esta histórica organización de gran importancia para los movimientos democráticos en esos países, igual que lo fue en su día para la disidencia checa.
Radio Free Europe/Radio Liberty transmite desde hace 75 años para países en los que no hay democracia o, al menos, existen graves carencias en sus medios de comunicación, ofreciendo información libre que los respectivos regímenes no quieren que su sociedad conozca.
Donald Trump confirmó este sábado algo que no se quería decir en voz alta pero que muchos temían: el corte de la financiación para la Agencia de Estados Unidos para los Medios Globales (USAGM), que se encarga de medios como Radio Free Europe o la Voz de América, entre otros, que hasta ahora corría a cargo del Congreso de Estados Unidos.
Radio Free Europe/Radio Liberty mudó su sede central de Múnich a Praga hace ahora exactamente 30 años, tras la caída del régimen comunista contra el que había estado luchando durante décadas. De hecho, sus primeras transmisiones fueron precisamente en checo, algo que puso en valor el ministro de Relaciones Exteriores, Jan Lipavský, tras conocer la noticia de su posible fin.
“Creo que todos entendemos la importancia de Radio Free Europe y lo que significó para Checoslovaquia bajo el régimen comunista al otro lado del Telón de Acero. En las emisiones en checo trabajaban gigantes como Ferdinand Peroutka y Pavel Tigrid, que ayudaban a difundir información libre en Checoslovaquia, donde no existía nada así”.
Por esa importancia que tiene para Chequia, donde en la actualidad trabajan unos 700 profesionales de esa emisora, así como su canal de televisión en ruso Current Time, en su mayor parte exiliados perseguidos en sus países de origen, Lipavský propone este mismo lunes en el Consejo de Asuntos Exteriores de la Unión Europea que sean los Veintisiete quienes asuman la financiación de este medio, por interés propio de la UE, defiende.
“Transmite a una amplia gama de países de Europa, a Rusia y a sus vecinos cercanos como Bielorrusia, además de Irán, por ejemplo, donde hay una base importante de fuerzas de ideas democráticas, y creo que a Europa le conviene que estas transmisiones continúen”.
Lo cierto es que, previsiblemente, no todos los países miembros verán con buenos ojos hacerse cargo de un presupuesto de 143 millones de dólares anuales. Pero no solo por una cuestión económica, sino porque la emisora emite aún para países como la Hungría de Viktor Orbán, o incluso Rumanía y Bulgaria en sus respectivas lenguas, lo que seguramente no sea del agrado de buena parte de su clase política.
Lipavský destaca la gran pérdida que supondría el cierre de Radio Free Europe/Radio Liberty.
“Radio Free Europe es una institución formada por personas, procesos, sistemas, colaboradores y tiene muchas redacciones. Por lo que si se cierra, no es algo que se pueda reconstruir como si nada. Por esto tenemos que hablar sobre lo que se puede hacer para preservar esta institución si Estados Unidos realmente corta su financiación”.
Una emisora de "locos radicales de izquierda"
El primero en hablar del cierre de Radio Free Europe fue el billonario Elon Musk hace alrededor de un mes. En un post en su red social X, dentro de su oleada de cierres de instituciones públicas con el argumento de ahorrar dinero a las arcas del Estado, describió a los redactores de la emisora como “locos radicales de izquierda” que gastaban mil millones de dólares al año. Esa cifra, en cualquier caso, sería la del total de las emisoras al cargo de la Agencia de Estados Unidos para los Medios Globales, ya que como, decíamos, a Radio Free Europe/Radio Liberty y su televisión Current Time le corresponden 143 millones.
Quizá más llamativo aún fue la calificación usada para los trabajadores de la empresa, que habitualmente, si recibían críticas, era justamente por lo contrario, como explicó a la Radio Checa Jolyon Naegele, que trabajó como corresponsal muchos años para la compañía.
“Son acusaciones completamente falsas. Trabajé en la sede en Praga y anteriormente en la Voz de América en Washington, y en la dirección había republicanos de mentalidad conservadora y libertaria. La Fundación Heritage tenía una gran influencia en Radio Free Europe, por lo que argumentos como ese están completamente fuera de lugar”.
Naegele coincidió en señalar la importancia de sus emisiones para sociedades que no viven en un régimen democrático, aunque Elon Musk en su post diga que "Europa ya es libre, excepto por su burocracia", escribió.
“Radio Free Europe es importante allí donde no hay un flujo libre de información, donde no hay medios de comunicación libres. Por eso que dejaron de transmitir a la República Checa a mediados de la década de los 90, pero reanudaron las transmisiones a Hungría bajo la administración de Joe Biden”.
Otro de los argumentos de Elon Musk es que nadie la escucha. Sin embargo, según los datos de Radio Free Europe/Radio Liberty, sus emisiones en 27 lenguas para 23 países son escuchadas por 46 millones de personas cada semana.