El comercio exterior marca saldo negativo
El saldo de la balanza comercial arrojó cifras negativas el pasado mayo, continuando con una tendencia que se extiende ya por cuarto mes consecutivo en el país.
Chequia cuenta cada vez con una mayor presencia en el mercado internacional, viendo sus exportaciones aumentar significativamente el último año. Sin embargo, esta dinámica se ve neutralizada por un incremento aún mayor respecto a las importaciones, lo que deja el saldo comercial en números rojos.
Así, en el propio mes de mayo, el comercio exterior marcó un déficit de unos 934 millones de euros, un resultado que se explica en buena medida debido al significativo aumento en el precio de los combustibles fósiles y al propio crecimiento de las importaciones a este respecto.
"El sólido crecimiento de dos dígitos en las exportaciones de bienes no fue suficiente para sacar la balanza comercial de mayo de los números rojos. El resultado negativo se debió principalmente a los combustibles fósiles, significativamente más caros año tras año, de cuyas importaciones depende en gran medida la República Checa", afirmó Stanislav Konvička, jefe del departamento de balanza comercial de la Oficina de Estadística Checa.
Según la propia Oficina de Estadística Checa, las exportaciones experimentaron un aumento del 18,1% en términos interanuales, alcanzando los cerca de 16 000 millones de euros. Sin embargo, esto también se vio acompañado por unas importaciones que crecieron hasta un 26,3% interanual, yéndose hasta los 16 774 millones de euros.
Este doble crecimiento también se aprecia con respecto al mes anterior, viendo las exportaciones crecer a un ritmo del 4,6% y a un 2,7% en el caso de las importaciones.
Con todo, las cifras arrojadas por este balance comercial no se explican tan solo a partir del sector energético. El comercio de metales básicos o de productos refinados del petróleo, entre otros, también marcaron importantes cifras de déficit. Por otro lado, el resultado general se vio afectado positivamente por un superávit comercial en sectores como, por ejemplo, la automoción, que arrojó un saldo positivo de unos 400 millones de euros.
Esta tendencia se aprecia con mayor claridad si cabe durante los primeros meses de este 2022 en particular. De enero a mayo de este año, la balanza comercial mostró un déficit de 2400 millones de euros, mientras que en el mismo período del pasado año terminó con un superávit de 3452 millones de euros.
La balanza comercial se entiende como el registro y la relación entre las exportaciones e importaciones de un país durante un determinado período de tiempo.
