El calor tropical no gusta ni a los elefantes de África
Un calor sofocante agobia en las últimas semanas a la República Checa. Las altas temperaturas causan problemas a la gente, a los animales y a las plantas. Quienes se "frotan las manos" son los propietarios de piscinas y de fábricas de cerveza.
"El calor afecta a personas sin diferencia de edad. Muchos se olvidan que tienen que evitar una larga estancia en el sol y que diariamente deben beber como mínimo unos tres litros de agua. Los que más sufren en estos días son, lógicamente, las personas de edad avanzada, los enfermos y los niños. Éstos deberían salir sólo por la mañana o por la tarde, cuando el calor no es tan intenso".
Los médicos registran un considerable aumento de infartos. Las ambulancias cruzan día y noche las calles de las ciudades checas.
Por otro lado, las altas temperaturas favorecen a los propietarios de las piscinas que registran un notable aumento de la clientela. Muchos buscan alivio también en las orillas de los ríos y los estanques.
Contentos se han puesto también los productores de cerveza. Actualmente, la venta de cerveza se ha duplicado. "Este año será exitoso. Normalmente, vendemos al día tres mil barriles de cerveza. En las últimas semanas se están vendiendo seis mil barriles, e incluso más", indicó Ales Rihácek, personero de la fábrica de cerveza Starobrno.
El sofocante calor afecta también a los animales de los Zoológicos, incluyendo a los provenientes de regiones tropicales. El elefante del Jardín Zoológico de Ostrava se negó a salir de su guarida por varios días. "Los que más sufren son los animales del Norte, tales como osos polares", indicó, Stanislav Dittrich, portavoz del Jardín Zoológico.
El Instituto Meteorológico checo pronostica que las altas temperaturas, superiores a los 30 grados centígrados, se mantendrán hasta mediados de agosto.