Designblok presenta lo mejor del diseño contemporáneo
Varios de los más fascinantes espacios de la capital checa acogen a partir del pasado lunes la 15 temporada del proyecto Designblok. Se trata de una exposición del diseño internacional que poco a poco se ha convertido en uno de los eventos más importantes de este tipo en Europa Central.
El diseño se ha convertido en un campo muy popular en Chequia, lo que demuestra incluso el creciente interés de los visitantes que cada año vienen a Praga para participar en Designblok, indica Zielinski.
“La escena del diseño checo ha cambiado bastante durante los últimos 15 años. En sus comienzos Designblok tenía sólo siete participantes y el programa estaba destinado sobre todo a los diseñadores profesionales. El año pasado vinieron 42.000 visitantes de todo el mundo”.Las exposiciones y los desfiles de moda se efectuarán en cuatro localidades de la capital. Una de ellas es la antigua estación de trenes de carga, en el barrio de Žižkov, donde reside el Superstudio de Designblok, la sección más extensa del festival.
La estación es una construcción de estilo funcionalista construida en los años treinta que este año fue incluida en la lista de los monumentos nacionales y cuyo extraordinario espacio se presta a la realización de proyectos bastante atrevidos.Los organizadores aprovecharon los antiguos raíles, los almacenes e incluso los vagones para crear la plataforma de las exposiciones de diseño hechas tanto por diseñadores reconocidos como por estudiantes de los colegios y universidades artísticas.
El Openstudio, situado en la Casa de Kafka, en el pleno centro de Praga, invita a casi cincuenta exposiciones de estudios de diseño, diseñadores de moda y también de joyas. Además, en las salas de la Casa de Kafka se ubica una presentación dedicada a los jóvenes artistas de mayor talento de Chequia.
Otros puntos del encuentro se hallan en el Art House Palacio de Colloredo-Mansfeld, cuyas salas barrocas ofrecen una experiencia inolvidable para los visitantes, y en la Iglesia de San Simón y San Judas, donde los interesados pueden acudir a ver el Designblok Premier fashion week, dedicado a los desfiles de moda.
A pesar del prestigio de Designblok, que sobrepasa las fronteras checas, los organizadores tienen que afrontar cierto desapego de parte del estado. El enorme evento dispone de un presupuesto de 470.000 euros. El recurso principal lo forman las tasas que pagan los aproximadamente 200 expositores, mientras que un tercio del presupuesto es dinero invertido por los patrocinadores. Sin embargo, los organizadores no pueden contar con ningún apoyo financiero de parte del Ministerio de Cultura Checo, según afirma Zielinski.“Disponemos de una subvención del Ayuntamiento de Praga pero los últimos años ya no alcanzamos para el subsidio del Ministerio de Cultura. El Ministerio nos comentó que los eventos tan grandes como Designblok tienen que ser autosuficientes”.
Este año se dirigen a Praga varios artistas reconocidos a nivel mundial. Entre ellos destacan la diseñadora francesa Matali Crasset, el holandés Hans van Bentem, la dupla flamenca A. F. Vandevorst, la checas Klára Nademlýnská y Liběna Rochová, la holandesa Henriette Tilanus o el diseñador español de moda de hombre, Roberto Lopéz Etxeberria. Designblok representa uno de los eventos más prestigiosos y más grandes en Europa Central y a lo largo de su funcionamiento se ha convertido en un modelo del festival de diseño para otras ciudades europeas. Designblok tendrá lugar en Praga hasta el 13 de octubre.