Declaran al escribano cerillo como el ave de 2011 en Chequia

La Sociedad Checa de Ornitología ha declarado al escribano cerillo (Emberiza citrinella) como el ave del año 2011. A pesar de tratarse de un pájaro cantor bastante extendido, en los últimos decenios su población se ha ido reduciendo marcadamente en toda Europa, lo que requiere su mayor protección.

Escribano cerillo, foto: Spot1972, Creative Commons 3.0

El escribano cerillo ha sido escogido por los ornitólogos checos como el ave del año 2011, por ser un claro ejemplo de cómo el desarrollo agro-industrial llega a afectar la naturaleza.

Los ornitólogos suponen que la causa de la paulatina desaparición del escribano cerillo es la forma de la explotación de las tierras por el ser humano y en especial, la intensidad del desarrollo de la agricultura, apoyada por la política común de la Unión Europea. Los especialistas piden que la protección de la naturaleza sea tomada en cuenta en la elaboración de una nueva política agraria de Bruselas, según recalcó Zdeněk Vermouzek, director de la Sociedad Checa de Ornitología.

Zdeněk Vermouzek

”Las formas de ayuda a la conservación del escribano cerillo sobrepasan las fronteras de los países. En primer lugar hay que cambiar la política agraria común de los Veintisiete. Consideramos necesaria la existencia de subvenciones al sector que permitan desarrollar una agricultura que sea considerada para con el medio ambiente. También depende del comportamiento de cada agricultor, de todos nosotros, que no exterminemos todas las matas salvajes en la naturaleza, para conservar el medio natural de vida de muchas aves y entre ellas, del escribano”.

Entre 2001 y 2003, anidaban en Chequia alrededor de tres millones de parejas de escribano cerillo, lo que documenta que se trata de una de las aves más extendidas en el país. Hace unos 100 años, no era nada extraordinario encontrarse con un escribano en la Plaza Venceslao, en pleno centro de Praga. No obstante, desde hace unos 30 años se registra una notoria reducción de su población, lo que podría llevar a su paulatina desaparición. El número global de esa ave en Chequia disminuyó en casi un millón de ejemplares durante ese tiempo. En Europa Occidental la situación es aún peor, ya que se ha reducido en un 50 por ciento su número.

Escribano cerillo, foto: Alan Vernon, Creative Commons 2.0

Este pájaro mide de 15 a 17 centímetros de largo. El macho tiene una cabeza amarilla y partes inferiores amarillas, con rayas marrones, mientras que los colores de la hembra no son tan intensos. Cuando llega el tiempo de la reproducción, los machos emiten un silbido especial que tiene dos fases. La primera contiene notas innatas, mientras que la segunda es diferente y los machos jóvenes la aprenden durante el primer año de su vida, imitando el silbido de los machos adultos. Esta característica sirvió de inspiración a los ornitólogos para impulsar una interesante actividad nacional, según informó Zdeněk Vermouzek.

“En el marco de la campaña de protección del ave del año, la Sociedad Checa de Ornitología, en cooperación con especialistas de la Universidad Carolina de Praga, hemos exhortado a la población a grabar el canto de los escribanos cerillo para verificar los ‘dialectos’ de su canto que se registran en este país”.

Los especialistas saben de la existencia en Chequia de dos ‘dialectos’ del canto del escribano cerillo con el que esta ave atrae a su pareja durante el período de reproducción. No obstante, en vista de la gran migración de las aves, los ornitólogos suponen que la actividad ayudará a descubrir la presencia en Chequia de otros ‘dialectos’ en el canto del escribano cerillo, importados desde algún otro país europeo.