Cinco muertos por inundaciones en la República Checa
Las inundaciones del fin de semana dejaron un saldo de cinco muertos en la República Checa. Equipos de rescate socorrieron a miles de personas en el norte del país donde las aguas anegaron ciudades y pueblos en las peores inundaciones de los últimos ocho años.
Situaciones parecidas se vivieron en diferentes regiones al norte del país. Frýdlant, con 8.000 habitantes, quedó durante horas aislada del resto del país. Los equipos de rescate evacuaron a muchos vecinos del lugar que se refugiaron en los techos de sus viviendas o en las copas de los árboles.
La riada se cobró cinco vidas humanas. Dos hombres se ahogaron dentro de sus casas cuando intentaban salvar parte de sus objetos personales. El presidente de la República, Václav Klaus, visitó la región afectada y en declaraciones para la TV checa constató que la situación es grave y preocupante.“Se trata de una catástrofe de enormes dimensiones. La obligación de todos nosotros es ayudar a los damnificados, de seguro el Gobierno también ayudará, pero lamentablemente la mayor parte del trabajo quedará en manos de los que aquí viven”, indicó el mandatario.
Los primeros informes de los equipos de rescate indican que solo en la región de Děčín, al noroeste del país, las aguas del río Kamenice afectaron o destruyeron más de 1.200 casas y unos 90 puentes.El Ministerio de Defensa envió a las zonas perjudicadas decenas de soldados que evacuaron a los damnificados y ayudan en las trabajos de limpieza, tal como confirmó el portavoz Jan Pejšek.
“El Ejército checo ha puesto a disposición de las Alcaldías de las ciudades afectadas a decenas de soldados con vehículos anfibios y maquinaria pesada”, sostuvo el vocero.En su sesión extraordinaria de este lunes, el gobierno checo acordó el envió inmediato de más de un millón y medio de euros a la región de Liberec, la más afectada por las inundaciones y el despliegue de unos mil soldados más.
El Gabinete del primer ministro, Petr Nečas, se reunirá otra vez esta semana para evaluar la gravedad de los daños. La agencia de noticias ČTK, adelantó que es posible que el Ejecutivo apruebe una ayuda de unos doce a catorce millones de euros para los damnificados y para la reparación de las infraestructuras destruidas por la riada.