Chequia vuelve a tener un Gobierno tecnócrata

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El presidente Miloš Zeman nombró este miércoles en el Castillo de Praga al Gobierno tecnócrata de Jiří Rusnok. El nuevo Gabinete dispone de un lapso de 30 días para pedir el voto de confianza ante la Cámara Baja.

El Gobierno tecnócrata de Jiří Rusnok,  foto: ČTK
Se repite la historia en la República Checa: el Gobierno surgido en base a los comicios parlamentarios no logró terminar su período de funciones y el país será dirigido por un Gabinete tecnócrata.

Mientras que en 2009, el Gobierno de Mirek Topolánek se vio obligado a dimitir al no superar la moción de censura de la Cámara Baja, este año el Gabinete de Petr Nečas tuvo que retirarse tras verse involucrado en un escándalo de corrupción y abuso de poder que está investigando la Policía.

El presidente de la República, Miloš Zeman, no dudó en nombrar a un Gobierno tecnócrata que aún no tiene garantizado el respaldo de la Cámara Baja. El primer ministro, Jiří Rusnok, señaló que buscará apoyo a través de todo el espectro político.

Jiří Rusnok,  foto: Alžběta Švarcová,  Archivo de ČRo
“No vamos a tratar de buscar el apoyo de un partido en concreto. Es lógico que los integrantes de la ex coalición gubernamental no se muestren muy dispuestos a respaldarnos, pero nos dirigiremos a la Cámara Baja en general”.

Jiří Rusnok agregó que tratará de convencer a los ex integrantes de la coalición gubernamental que se esforzará por llevar a cabo varias tareas que dejó sin acabar el Gobierno anterior.

“Por ejemplo, trataríamos de aprobar algunas leyes del Código Civil y crear el registro de contratos del sector público que supone publicar obligatoriamente todos los acuerdos firmados. Además, trataríamos de aprobar las nuevas leyes de universidades y de educación regional y muchas más”, expresó.

Jan Kohout y Miloš Zeman,  foto: ČTK
Por su parte, el nuevo ministro de RR.EE., Jan Kohout, resaltó que su prioridad será llevar a cabo el nombramiento de embajadores en los países donde dicho cargo quedó vacío debido a las discordias entre el ex jefe de Diplomacia, Karel Schwarzenberg, y el presidente de la República, Miloš Zeman.

“Es imprescindible, porque durante dos años queda suspendida una de las tareas esenciales de este sector, o sea, los cambios personales en las embajadas. Los empleados tienen sus destinos, sus familias, necesitan saber cómo planificar su vida. No sé si lograré resolverlo de alguna forma, pero seguramente lo intentaré”, subrayó.

Jan Fischer,  foto: ČTK
Otra de las tareas importantes que tendrá por delante el nuevo Gobierno, sería llevar a cabo el presupuesto estatal para el próximo año, aprobado por el Gobierno de Petr Nečas, que cuenta con un déficit de 4.200 millones de euros. El nuevo ministro de Finanzas, Jan Fischer, tendrá que detallar los respectivos capítulos del presupuesto y lograr el visto bueno de los diputados.