Chequia refuerza la vigilancia tras el atentado de Berlín
La Policía checa ha intensificado la vigilancia de los puntos sensibles ante un ataque terrorista desde este martes por la mañana, dada la situación de inseguridad provocada por el atentado de este lunes en Berlín. El Gobierno decidirá si elevar el nivel de alerta antiterrorista del país.
Una comisión de seguridad se ha reunido además a primeras horas del día con el Gobierno para estudiar el caso y decidir si elevar o no el nivel de alerta antiterrorista del país, lo que supondría cierta movilización de las Fuerzas Armadas. El Ministro del Interior, Milan Chovanec, ha considerado poco probable que se llegue a este punto, ya que de momento no se dispone de información que apunte a un ataque en territorio checo.
“Por la noche recibimos información desde Alemania sobre la identidad del autor del atentado y hasta esta mañana hemos estado investigando si tenía relación con la República Checa, si esa persona se había movido por este país o si tenía lazos con alguien de aquí, pero nada de esto se ha confirmado”.Del mismo modo, el Ministerio de Relaciones Exteriores no pedirá especiales precauciones a los ciudadanos checos que visiten Alemania, declaró la portavoz de la institución, Michaela Lagronová.
“Por supuesto los servicios secretos checos colaboran de algún modo con sus equivalentes alemanes. Si nos llega cualquier información que dé a entender que pueden haber otros atentados, entonces evidentemente emitiremos un comunicado de advertencia. Pero ahora mismo no tenemos esa información”.
Las autoridades alemanas tampoco ha hecho pública ni la identidad del terrorista ni de las víctimas, así que de momento no es posible saber si entre los fallecidos o heridos se encuentra algún checo.Varios representantes políticos checos han mostrado sus condolencias, entre ellos el primer ministro, Bohuslav Sobotka, que ha dado el pésame a los familiares de las víctimas y mostrado solidaridad con el Gobierno alemán, y el ministro de Cultura, Daniel Herman, quien ha expresado la necesidad de que “el mensaje positivo de la Navidad no se vea acallado por el mal”.