Chequia bate su récord de exportaciones con casi 150.000 millones de euros
La República Checa sigue subrayando su carácter exportador. El año pasado logró vender al exterior mercancías por valor de casi 150.000 millones de euros, la mayor cantidad en la historia del país. El 80% de las ventas fueron destinadas a países de la Unión Europea.
“La Unión Europea funciona en lo económico de forma fantástica, sobre todo en su núcleo, y nosotros somos parte de él. De esto se desprende que es de interés para nuestro país que la Unión Europea permanezca entera, que no salga de ella el Reino Unido, y que funcione Schengen. Pero la Unión tendrá también que proteger sus fronteras exteriores, eso es evidente”.
Un año más el principal socio exportador de Chequia es Alemania. Sin embargo, de acuerdo con Mládek, se trata de ventas con poco valor añadido, ya que consisten sobre todo en piezas y componentes que luego se montan en el país vecino, dando lugar al producto final, por ejemplo automóviles, que a continuación se exporta a otros mercados.Mientras que el comercio con la Unión Europea se afianza, la República Checa va perdiendo sus lazos tradicionales con otras regiones, especialmente con el entorno de los países exsoviéticos. Por ejemplo, las exportaciones checas a Rusia se redujeron un tercio en 2015. También fue menos intenso el comercio con los países de Oriente Medio.
Detrás de ello se hallan causas políticas, como las sanciones a Rusia o el conflicto de Siria o Libia, pero también el bajo precio del petróleo, apunta Radomil Doležal, director de la agencia CzechInvest.
“Es una reacción a la crisis del petróleo, en la que se llegó a una limitación de los fondos de las potencias petroleras, y a la devaluación de sus monedas, que está relacionada, y que encareció las importaciones”.
Entre las alternativas para diversificar la cartera de clientes de la República Checa, destaca Irán, un mercado recientemente abierto y al que Checoslovaquia exportaba en el pasado. Otras opciones, en palabras del ministro Mládek, son Marruecos, Egipto y los Estados Unidos, donde se abrirá una sucursal de la agencia CzechTrade. Esta tratará de facilitar a los empresarios checos la entrada al mercado local, explica Doležal.“En cuanto a Estados Unidos, su economía no es sencilla, pero por lo que toca a la estabilidad de su moneda o barreras de entrada, es buena, un poco correosa, pero es algo que se puede trabajar”.
En orden de mejorar su capacidad exportadora, en opinión de Mládek, la República Checa debería hacer énfasis en la formación técnica. Esto ayudaría a aumentar el valor añadido de las ventas al exterior, y limitaría el papel de Chequia como suministrador de piezas para Alemania. Al mismo tiempo habría que conseguir ocupar los cien mil puestos de trabajo vacantes que ahora mismo se ofrecen en el país, lo que se podría solucionar empleando ciudadanos de Europa Oriental.