Carne artificial, un producto alimentario del futuro
Las tecnologías del futuro, las perspectivas de la medicina, así como la fabricación de carnes en laboratorios. Todo esto y más fueron temas debatidos en Praga en la tercera edición del festival internacional de tecnologías modernas Future Port Prague.
La alimentación fue uno de los temas centrales del festival dedicado a las tecnologías modernas y los avances en diferentes sectores, durante el cual se dieron cita en Praga unos 80 especialistas de varios países. La sede de la actividad que acaba de terminar fue el Área de Exposiciones de Holešovice. Además del festival Future Port Prague, se celebró una conferencia en la que científicos, médicos, programadores y especialistas en otras ramas intercambiaron sus visiones de la futura existencia del ser humano en la Tierra.
Uno de los problemas fundamentales del futuro es garantizar alimentos suficientes para la creciente población de la Tierra. Actualmente esta consta de unos 7700 millones de personas, pero se calcula que en el año 2030 el número global de habitantes llegue a 8500 millones y en 2050 a 10 000 millones de personas. En el festival de Praga se presentaron nuevas tecnologías que representarán una revolución en la industria alimentaria, así como en la distribución de los alimentos. De acuerdo con Martin Holečko, fundador del Future Port Prague, en el evento fueron presentadas por ejemplo, muestras de carne cultivada de forma artificial.”Eran unas frituritas de pollo, pero la producción de la carne artificial está en sus comienzos y es muy cara. Lo importante es que con este método no habrá que matar a los animales para comérselos, sino que bastará con sacarles unas células y estas cultivarlas con ayuda de proteínas vegetales. Producir una de estas frituritas de carne artificial cuesta actualmente unos 100 dólares, pero en el futuro podría costar igual que la carne normal. Debido al alto coste, en el festival pudimos dar a probar este plato solamente a un par de personas, entre ellas a periodistas, que luego compartieron sus impresiones con los demás”.
Las impresiones de los degustadores fueron muy positivas. Indicaron que la carne artificial realmente tenía sabor a carne de pollo. Lo único que su estructura recordaba más bien a carne molida que a carne de ave cortada en pedazos.
Por su parte, expositores checos presentaron en el festival por ejemplo, una bata de dormir ignífuga, que en el futuro ayudará a los bomberos a proteger y salvar a los habitantes de un edificio en llamas.
En Praga se debatió igualmente sobre la inteligencia artificial, el futuro de las finanzas, movilidad, ecosistemas, moda, así como las formas de la enseñanza de aquí a unos años, entre muchos otros temas más.