Cada vez más niños pagan con tarjeta de crédito
En la República Checa, cada vez más niños menores de 15 años pagan con tarjeta de crédito. Por ejemplo, los bancos Česká Spořitelna y Fiobanka han registrado un aumento interanual de aproximadamente 20% en el número de tarjetas emitidas a los menores de edad.
“En los últimos dos años hemos registrado un aumento estable en el número de cuentas abiertas para niños entre los 8 – 14 años de edad, lo que corresponde al número de tarjetas emitidas. Anualmente, el número de tarjetas para menores ha aumentado un 20%. Se trata de las tarjetas de débito Visa Classic y Mastercard”.
El número exacto de tarjetas emitidas no ha sido apuntado por la compañía. Un aumento similar ha sido registrado por Fiobanka. Según Fiobanka, la demanda de tarjetas para menores está relacionada con la posibilidad de los padres a enseñar a sus hijos cómo gastar mejor su dinero.
Los bancos Komerční Banka y ČSOB han indicado que el interés de los menores por tarjetas ha sido estable. En promedio, los clientes menores de Komerční Banka utilizan su tarjeta dos veces al mes, con un importe de aproximadamente 13 euros por transacción. ČSOB ofrece hasta una tarjeta de prepago para menores, como destaca su portavoz Patrik Madle.
“A los niños menores de 15 años les ofrecimos tarjetas de débito conectadas a una cuenta bancaria, o tarjetas de prepago COOL que no llevan la necesidad de abrir ninguna cuenta, lo que sirve como una herramienta ideal para poder enviarles dinero de bolsillo”.Así, los niños pueden comprarse una merienda o ir al cine después de la escuela por sí solos. La ventaja evidente de las tarjetas para menores es que los padres pueden estar informados sobre los gastos de sus hijos. Pueden incluso establecer límites de cuenta y así controlar cuánto dinero gastan sus hijos.
Según la ley, los bancos están obligados a abrir una cuenta independientemente de la edad del cliente, y junto a la cuenta emitir una tarjeta de pago. Como explica la portavoz del Banco Nacional Checo, Denisa Všetíčková.
“En el caso de menores se supone que los bancos establezcan las condiciones para mantener la tarjeta de pago, de la manera que las condiciones correspondan a la madurez intelectual y volitiva de los menores”.
El límite establecido por la mayoridad de los bancos para abrir una cuenta es de 8 años de edad, como mínimo. Hasta los 18 años, sigue siendo necesario obtener el consentimiento de un representante legal.