Cada vez más checos cuestionan su participación en los comicios parlamentarios

Cada vez más ciudadanos de la República Checa cuestionan su participación en las próximas elecciones parlamentarias, cansados de no encontrar en el escenario político checo un cambio de actitud hacia los electores, según se desprende de los últimos sondeos sociológicos.

La disposición de los checos a participar en los comicios a la Cámara de Diputados, a celebrarse en junio, sigue descendiendo. Los electores se sienten cada vez más desilusionados por el comportamiento de los políticos, con lo que crece su mala gana de acudir a las urnas, indica Vera Haberlova, de la agencia de opinión pública STEM.

"Los ciudadanos no pueden decidirse a quién elegir. No es que pierdan interés por la política y no quieran ir a entregar sus votos por principio. El motivo es más bien la desorientación del electorado, y ésta viene aumentando", dice Vera Haberlová.

Mientras que hace seis años, no sabían a quién elegir hasta el último momento sólo 14 de cada cien personas, actualmente es ya la quinta parte del electorado.

"Muchas de estas personas que todavía no ven claro a quién elegir esperan una señal, quizá un símbolo según el cual decidirían en el último momento a que partido entregarán su voto", opina Jan Hertzman, de la agencia SofresFactum.

Los sociólogos estiman que la participación en las elecciones del próximo junio será aproximadamente de un 2,3 por ciento inferior a la de los comicios anteriores. A pesar de ello, no debería registrarse bajo el 70 por ciento, lo que es una cifra mucho mayor que en los países eurooccidentales en los que acude a las urnas, en promedio, un 50 por ciento de los electores facultados.