Antiguos disidentes rusos critican al presidente checo por su actitud de cara a Ucrania

Miloš Zeman, foto: ČTK

Disidentes anticomunistas rusos, que protestaron por la invasión de Checoslovaquia en 1968, criticaron al presidente checo, Miloš Zeman, por su actitud de cara a la crisis de Ucrania.

Natalya Gorbanevskaya,  foto: Kristýna Maková
Durante la celebración de la Fiesta Nacional, el 28 de octubre, el presidente de la República, Miloš Zeman, galardonó in memóriam a la antigua disidente anticomunista Natalya Gorbanevskaya.

La activista integró el grupo de ocho personas que protestaron en Moscú contra la invasión de Checoslovaquia por las tropas del Pacto de Varsovia durante la llamada Primavera de Praga de 1968.

Los disidentes de aquella época criticaron al mandatario checo, Miloš Zeman, por su actitud ambivalente ante la crisis de Ucrania, algo totalmente opuesto con los principios declarados por Gorbanevskaya.

Yaroslav Gorbanevsky, hijo de la activista, fallecida el año pasado, indicó que sería conveniente que el presidente Zeman pidiera a Rusia que deje en libertad a todos los presos políticos.

Yaroslav Gorbanevsky,  foto: ČT24
Yaroslav Gorbanevsky, radicado en París desde los años 70, recordó que su madre pidió al presidente Zeman que no viajara a los juegos olímpicos de Sochi, pero que el mandatario no la escuchó.

Gorbanevsky no ocultó su sorpresa ante el hecho de que otros de los antiguos disidentes rusos del grupo de su madre no fueran galardonados.

Jiří Ovčáček, portavoz del presidente Zeman se limitó a explicar que el mandatario había escogido a una persona por periodo histórico y que dos activistas rusos habían sido invitados a la ceremonia de entrega de los galardones.

Miloš Zeman,  foto: ČTK
En declaraciones a los medios de comunicación Viktor Fainberg y Pavel Litvinov informaron que no viajaron a Praga, porque no compartían la postura del presidente Zeman.

Para Fainberg la libertad es igual para todos, ya sea en Checoslovaquia o en Ucrania, por lo que no entiende a qué responde la actitud del mandatario Zeman que asegura que se trata de una guerra civil y no reconoce la presencia de soldados rusos en el lugar.

El antiguo disidente ruso dijo que aceptaría un galardón, en caso de que se lo ofrecieran, siempre y cuando fuera evidente un cambio de actitud por parte del mandatario checo en cuanto a la crisis de Ucrania.