Alois Klar cambió la postura de la sociedad ante las personas invidentes
Alois Klar fue el primero que consiguió en las tierras checas integrar a las personas invidentes en la sociedad. Para recordar el 250 aniversario de su nacimiento, la Facultad de Filología de la Universidad Carolina en Praga preparó una exposición titulada “Tú me llevabas...” (Tys mě vedl…). Los visitantes pueden teclar en una máquina de escribir del sistema Braille, conocer el espacio a tientas y otras cosas que acercan a los videntes el mundo de los ciegos.
La exposición titulada “Tú me llevabas….” no está destinada solamente a los académicos sino también al amplio público. Los invidentes hasta el final del siglo XIX vivían apartados de la sociedad, lo que cambió gracias al esfuerzo de Alois Klar. Se trataba del primer intento de integrar a los invidentes en la sociedad y la exposición instalada en el Karolinum, demuestra la tradición y el desarrollo de la asistencia en las tierras checas.
Uno de los objetos que los visitantes pueden encontrar en la exposición son libros táctiles con dibujos plásticos. La reacción de los niños invidentes a este tipo de libros nos la cuenta Terezie Kochová, de la Asociación de los Padres y Amigos de los Niños Ambliopes e Invidentes en Chequia.
Alois Klar nació en 1763 en una familia humilde. Estudió en Praga y se graduó en Filosofía, lo que más tarde le sirvió para su trabajo en el instituto de la ciudad de Litoměřice. Allí se desempeñó como profesor de latín, lenguas clásicas y de religión.
Alois Klar era considerado un excelente pedagogo pero aparte de sus actividades en el campo universitario era un gran humanista y se hizo famoso gracias a sus acciones a favor de las personas invidentes. Gracias a sus numerosas publicaciones literarias tenía suficientes recursos para poder participar, en 1807, en la fundación del Instituto Privado para los Ciegos y Enfermos de Vista. En esta época existían instituciones educativas de este tipo solamente en Italia, Francia e Inglaterra.
En 1832 Alois Klar fundó un instituto diferente también dedicado a las personas invidentes. Se llamó Instituto para Manutención y Empleo de los Invidentes Adultos en Chequia que puede cosiderarse un paso muy progresista en el siglo XIX. De ahí también procede la cita más famosa del fundador: El invidente debe ser llevado con una mano firme pero en un guante de seda. El instituto prácticamente funciona hasta el día de hoy, lo único que ha cambiado es el edificio. El barrio praguense donde se encontraba el antiguo instituto, pasó a llamarse Klárov en honor del fundador, y de la continuación de sus actividades se encarga el Instituto de Alois Klar en Praga, que sigue siendo la única escuela secundaria en la República Checa para niños invidentes.
