Zeman: “La regulación del tabaco aumentaría el contrabando“
Mientras que en Europa se aprueban medidas para endurecer la ley antitabaco, el presidente checo, Miloš Zeman, se opone a las regulaciones de la industria tabacalera porque estima que eso aumentaría el precio de los cigarrillos y bajaría la calidad de los productos.
El mandatario checo, Miloš Zeman, no está de acuerdo con las regulaciones europeas, y durante su visita a Bruselas hace un mes, dijo que la nueva normativa golpearía a la industria tabacalera, haría crecer el paro en dicho sector y causaría considerables pérdidas en los presupuestos estatales de los Veintiocho.
Como parte de su gira por las principales regiones del país, Zeman visitó este miércoles la fábrica de cigarrillos Phillip Morris en la ciudad de Kutná Hora. El jefe del Despacho presidencial, Vratislav Mynář, dijo en declaraciones a la Radiodifusión Checa que el mandatario, con su actitud pragmática protege puestos de trabajo.
“El presidente defiende una postura totalmente pragmática para impedir que miles de personas se queden sin trabajo en la ciudad de Kutná Hora”.El presidente Zeman navega contra viento y marea. En momentos en que los países de la Unión Europea combaten el tabaquismo por lo perjudicial que resulta para la salud, el mandatario checo se codea con la industria tabacalera y realiza una visita oficial a la fábrica Phillip Morris, el mayor representante de dicho sector en el país.
Consultado por la Radiodifuisión Checa, Mynář insistió en que el mandatario teme que la reducción de la producción de cigarrillos fomente el contrabando y la baja calidad de los productos, pero que lo más grave es el aumento del desempleo.
“La razón de la visita a dicha fábrica es muy sencilla, la aplicación de las regulaciones europeas reducirán la producción de cigarrillos y eso afectará a la factoría de Kutná Hora, por eso el presidente manifestó su apoyo”.
En el resto de Europa valen otros argumentos, y el Parlamento Europeo aprobó la obligatoriedad de que la advertencia sobre el peligro contra la salud cubra el 65% de la superficie del paquete y la prohibición de los cigarrillos con sabores.
Para la mayoría de los eurodiputados la salud de los ciudadanos está por encima de los intereses económicos e insisten en que el tabaquismo sigue siendo la principal causa de la muerte de 700.000 personas al año.