Uno de cada cinco checos cambia de empleo
Poco reconocimiento en el trabajo, la baja probabilidad de poder avanzar en la carrera profesional, y un sueldo bajo. Estos son los tres motivos principales por los que los checos suelen cambiar de empleo.
Uno de cada cinco checos cambió de trabajo el año pasado, de acuerdo con un reciente estudio de la compañía Randstad. Otro 30% de los trabajadores consideraba la eventualidad de hacerlo.
Los jóvenes son los que suelen cambiar empleo con mayor frecuencia, sostiene Alžběta Honsová, especialista en recursos humanos.
”En mayor medida cambian de trabajo los jóvenes entre los 18 y los 25 años de edad. Eso es lógico, ya que esas personas recién van entrando al mercado laboral y no tienen todavía una idea clara sobre lo que desearían hacer en el futuro. Según la experiencia que tenemos, los ciudadanos cambian de empleo mayormente en el curso del primer año de entrar a trabajar”.
Algunas personas cambian de trabajo porque llegan a sentirse agotadas por el ritmo demasiado intensivo aplicado en su centro laboral. Muchos llegan a cambiar el puesto de gerente por el de un empleado corriente, o un obrero. A algunos llega a cansarles el trabajo administrativo y la rutina. Necesitan cambiar de lugar, limpiarse la cabeza y relajarse.
Por ejemplo Kristýna, una joven de Praga, decidió cambiar por un tiempo su trabajo en la administración pública por las labores en una finca, donde crían cabras.
”A mí me atrae esta posibilidad de cambiar por completo el estilo de vida que había practicado hasta el presente. Acá llegué a trabajar por un tiempo de forma voluntaria, para familiarizarme con este modo de vida. Luego pensaré si irme a vivir y trabajar al campo a una finca por más tiempo”.
En la finca cerca de Praga trabajan actualmente más de veinte voluntarios y algunos decidieron quedarse allí como empleados regulares.
Otra posibilidad es irse a trabajar al menos por un tiempo al extranjero. Así lo hizo entre otros Václav, a quien dejó de gustarle su trabajo en Chequia decidió probar su suerte en Nueva Zelanda, como cuenta.
“El trabajo en Nueva Zelanda es para mí como un descanso mental. Conseguí empleo en una empresa que realiza trabajos en altura. La mayor parte del tiempo estoy atado a un cordón en las alturas y cumplo tareas de reparación y mantenimiento de edificios. Nadie me presiona, nadie me obliga a acelerar el trabajo y eso me satisface”.
A un gran número de checos el trabajo en el exterior llega a gustarles y, o se quedan a vivir en el país dado o, al regresar a Chequia buscan una nueva oportunidad para salir a trabajar a otro país. Los profesionales que consiguen empleo con mayor facilidad tanto en este país como en el extranjero, son especialistas en profesiones obreras, informáticos, médicos y enfermeras.