Un nuevo escándalo quita brillo al Ministerio de Defensa
Un nuevo escándalo envuelve al Ministerio de Defensa. El viceministro encargado de las compras de armamento fue destituido por sospechas de corrupción.
Los escándalos están a la orden del día. Recientemente un ladrón entró en la sede del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas, la Inteligencia Militar publicó los nombres de sus agentes en activo y tres generales fueron destituidos por mantener, de manera indirecta, contactos con un espía ruso.
El actuar sospechoso del viceministro de Defensa, Jaroslav Kopřiva, fue desvelado por el diario Mláda Fronta Dnes, que desde hace tiempo seguía los pasos del funcionario ministerial. Él era el responsable de la compra de pertrechos militares y había sobrevivido a todos los ministros que pasaron por dicha cartera.
El nuevo gran golpe sería la compra de 25 lanzaminas por unos 115 millones de euros a la empresa finlandesa Patria. Para evitar la convocación de una licitación pública, Kopřiva inventó un proyecto ficticio con Eslovaquia, ya que según las normas europeas, en caso de cooperar dos países comunitarios, no es necesario realizar el concurso.Esta vez el tiro le salió por la culata. Stanislav Mareš, representante de la empresa finlandesa reveló a la Policía los planes del viceministro de evadir la licitación pública.
„En la última reunión fue descrito el procedimiento exacto para evadir los requisitos para la convocación de una licitación pública. Me pareció que semejante información iba en contra de las normas legales por lo que decidí informar a la Policía”, sostuvo Mareš.
El ministro de Defensa, Alexander Vondra, destituyó en el acto al viceministro Kopřiva y entregó el caso a los organismos de investigación de la Policía.En declaraciones para el diario Mladá Fronta Dnes, Vondra sostuvo que en el Ministerio funcionaba desde hace años un extraño sistema de compra de pertrechos militares y que había llegado la hora de poner fin a semejante situación.
Salió a la luz que el Ministerio de Defensa no estaba interesado en la compra de ningunos lanzaminas. Todo parece indicar que el viceministro dominaba una red de colaboradores capaces de llevar a buen puerto sus negocios, aún cuando él tuviera que dejar la cartera de Defensa.