Un frío que mata

Foto: CTK
0:00
/
0:00

Una fuerte ola de frío sigue azotando a la República Checa. Las bajas temperaturas se cobraron seis vidas y los meteorólogos pronostican tan sólo una leve subida de las temperaturas para los próximos días.

Foto: CTK
Más de treinta grados centígrados bajo cero se registraron este lunes en la República Checa. La presente ola de frío complica la vida de todos los ciudadanos, pero los más amenazados son sin duda las personas que viven en la calle, los "sin techo".

Precisamente cinco personas sin techo fueron víctimas mortales de las bajas temperaturas. El subdirector de la Policía Checa, Ludvík Klema, explicó que partiendo de la difícil situación climática los policías tendrán mayor consideración para con las personas que viven en la calle.

"Podemos decir que la policía tendrá mayor consideración con los sin techo, pero velará por que no vayan a ser los causantes de un incendio en algún lugar abandonado. Entendemos que vivir en la calle es muy difícil, insisto en que habrá un mayor grado de consideración, pero no se les tolerarán arbitrariedades", matizó Ludvík Klema, subdirector de la Policía Checa .

Es sabido que las personas sin techo suelen refugiarse en los medios de transporte urbano nocturno, en inmuebles abandonados, en las estaciones de trenes etc. Muchas veces han causado incendios en sus intentos por calentarse.

Foto: CTK
Estos días los albergues y centros de emergencia para personas sin casa están a reventar, y en algunas localidades en el interior del país no dan abasto.

La sexta víctima de la ola de frío en la República Checa fue un hombre de 53 años de edad que olvidó las llaves dentro de la casa, rompió la ventana para intentar abrir la puerta, pero se desangró y al final murió congelado.

La ola de frío provoca problemas en las carreras ya que sobre el asfalto se forman placas de hielo, los ferrocarriles llegan atrasados, hay problemas con el suministro de energía y aumentó el número de fracturas ya que muchas veces los transeúntes se caen tras resbalar en las placas de hielo en las aceras.

Los meteorólogos checos anuncian que las temperaturas subirán un poco a mitad de semana, pero que la ola de frío se mantendrá toda la semana.