Un cafecito con Edita Klegerova
Atraídos por su estética y sonido la gente normalmente se acerca a ellos luego de los conciertos y trata de extraer los secretos de un mecanismo que revive el arte de una gran época. Lo mismo pasa con sus intérpretes. Hoy hablamos tendidamente con la cembalista Edita Klegerova sobre su relación con este instrumento, sobre su carrera y sobre música de Europa y de América.
¿Nos puede decir algo sobre su experiencia de estudios en La Haya y Londres, y sobre cómo tomó contacto con la música antigua española?
Llegué a La Haya luego de graduarme en la Academia de Música de Praga donde en efecto tuve mi primer contacto con el pedagogo Jacques Ogg, con el cual llevé cursos de interpretación musical. La experiencia allá fue excelente ya que el Departamento de Música Antigua de La Haya incluye aproximadamente doscientas personas que no sólo son holandeses sino también estudiantes de todo el mundo. En esta Academia se estudia el cémbalo como un instrumento independiente que tiene su propio departamento y es posible hacer trabajo en conjunto con instrumentistas de música barroca y por lo tanto hacer música de cámara con instrumentos originales o trabajar con estudiantes de danza barroca. Talvez mi primer acercamiento con la cultura española fue allá, ya que había estudiantes tanto de España como de América Central y del Sur con lo cuales toqué y con mi profesor que también enseña en España lo cual me despertó el interés no sólo a la cultura española en general sino también por su música. Luego de La Haya me marché a estudiar por un año a la Academia Real de Música de Londres y fue muy interesante a pesar de que su Departamento de Música Antigua era mucho más pequeño. Había más posibilidad de enfocarse por esta razón. Especialmente respecto a la instrumentación ya que había muchas oportunidades de tocar música de cámara y por supuesto la oportunidad de estar en Londres que es un magnífico lugar.
¿Cuál ha sido su relación con el Padre Soler y con Scarlatti, que como es bien sabido trabajó también en la corte española?
Un cembalista se confronta con el repertorio de Soler y Scarlatti como parte de sus estudios. He estudiado en el Conservatorio una especialización en piano y esas composiciones de Scarlatti y Soler no son populares en esta cátedra como las sonatas de Beethoven. Solamente en el momento cuando comencé a tocar cémbalo empecé a familiarizarme con esas composiciones que para cémbalo son consideradas más bien de un carácter técnico, ya que todos los otros instrumentos tienen estudios escritos a propósito para perfeccionarse técnicamente pero con el cémbalo no hay composiciones dedicadas al mejoramiento de la técnica y para tal fin utilizamos las composiciones de Scarlatti. Este es el primer momento para un cembalista de llegar a conocer esas composiciones y luego puede ocurrir que a uno le comiencen a gustar esas composiciones y te dedicas más a ellas. Para nosotros el Padre Soler es menos conocido y en penumbra que Scarlatti.
En los recitales lamentablemente no se escucha la música del Padre Soler en el repertorio de los cembalistas checos lo que es una lástima ya que sus composiciones son muy interesantes. Soler tiene composiciones que son más sencillas a veces pero luego tiene también composiciones que son más refinadas que lo contrapesan. La diferencia entre Scarlatti y Soler es que en la obra de Soler hay más elementos característicos de la música española reflejando además un estilo guitarrístico. Scarlatti por su parte tiene un estilo más clásico y depurado. Soler básicamente escribe en el bajo continuo algunos ornamentos que le da rasgos muy particulares a toda la composición.
Yo personalmente prefiero sonatas que son interesantes para mí. Soler, respecto a la composición, tiene particularidades en la modulación y tiene sorpresas. Otra particularidad que me gusta con Soler es que él tiene ocho preludios compuestos en tonalidad menor que provienen de un libro integral de composiciones. Esos preludios son muy cortos, de cuatro líneas, escritos en el estilo de los Preludios franceses asimétricos de Louis Couperin lo que no podemos verlo con Scarlatti. La armonía de Soler es muy innovadora y si uno no supiera que es él pensaría que proviene del siglo XX. Esos preludios menores se suelen tocar como introducción a algunas sonatas. Para mí fueron una revelación ya que escribía composiciones que suenan como sonatas del clasicismo temprano en un estilo muy claro y luciente y por otra parte tiene esas composiciones como esos preludios que son siempre de carácter melancólico pero de color interesante en Fa menor y Re menor.
¿En el programa de Praga también interpretaron piezas de compositores de Bohemia, como por ejemplo de Frantisek Benda y de su hermano Ji"i Antonín Benda. Tienen algo en común con los músicos españoles? Se puede hablar de un estilo barroco común?
Nuestra idea para hacer el concierto fue precisamente combinar los estilos español y bohemio. Mi idea era añadir composiciones contemporáneas al Padre Soler. Jiri Benda tampoco era un compositor típico para su tiempo ya que sus composiciones reflejan un clasicismo temprano como Soler. En esta época los músicos viajaban mucho, así J.A. Benda vivió una gran parte de su vida en la corte de Gotha y en Alemania en general, y luego viajó a Italia pero tan sólo en una ocasión. No tuvo, que sepamos mucho contacto con la música española pero si en general con otros músicos. No hay mucha solidaridad en la composición entre ellos ya que Benda componía con tres movimientos mientras que Soler tenía composiciones de uno solo por lo que la estructura de uno y otro compositor su difieren.
¿Ha tocado en alguna ocasión obras de compositores que fueron originarios o que vivieron en la América Española, tales como Domenico Zipoli o Tomás de Torrejón?
Desgraciadamente no llegamos a tocar esa música. Conozco a Domenico Zipoli, se usa sobre todo como música de tipo pedagógico pero desgraciadamente no se toca en conciertos. Es una lástima ya que sería muy rico para nuestro repertorio y sería interesante. Se conocen aquí sobre todo composiciones españolas del siglo XVI y luego hay una época oscura que dura hasta el siglo XVIII con la aparición del Padre Soler. No hay composiciones en la música española siguiendo la forma musical de la Suite, tal y como la usaba Bach, que es una lástima.
¿Tiene algún proyecto de grabación?
Estamos preparando un nuevo programa con mi colega flautista, uno de música francesa barroca con el cual es posible que colaboraremos bailarines de danza barroca lo que es interesante ya que no es sólo un proyecto auditivo sino también visual; además el tempo en que tocamos la música también cambia cuando se hace pensando en la gente que tiene que bailar al ritmo de ella.
Tenemos un programa preparado para música contemporánea compuesta para instrumentos de la época barroca que es muy interesante para la flauta por los efectos experimentales sonoros. También preparamos un proyecto de compositores que trabajaron en Viena que talvez no se tocan tan frecuentemente tales como Georg Muffat o Alessandro Poglietti y que a pesar de ser joyas de la música probablemente han permanecido un poco olvidados. Ya que como preparo para mi doctorado el repertorio de Benda pienso tocar dos conciertos recién descubiertos para cémbalo de Benda que no han sido tocados en tiempos modernos.