Trabajar a media jornada es algo poco extendido en Chequia
Trabajar a media jornada es algo que se practica muy poco en la República Checa. Este país figura incluso entre los que menos aprovechan esa posibilidad a nivel de toda la Unión Europea.
En la Unión Europea la media de las mujeres que tienen reducida su jornada laboral es del 30% aproximadamente y en el caso de los hombres del 9%, de acuerdo a datos dados a disposición por la Oficina de Estadísticas Checa, que se basó en los informes de Eurostat del año pasado. Las personas deciden trabajar a media jornada para poder dedicarse más tiempo a sus hijos y familia en general, o por razones de salud, de estudio, etc.
El menor número de mujeres en los países comunitarios que trabajan a media jornada se registra en Europa del Este, concretamente en Bulgaria, donde labora de esa forma una de cada 45 mujeres. En Chequia y Polonia es una de cada 10 y en Eslovaquia y Rumania una de cada 13. A su vez, en los Países Bajos aprovecha esa posibilidad el 76% de las mujeres y el 26% de los hombres, y en Alemania y Austria casi el 50% de las mujeres y una décima parte de los hombres.
De acuerdo a la Cámara Comercial checa, la legislación actual del país no impulsa una mayor flexibilidad laboral, sino que más bien la obstaculiza. Las madres con hijos difícilmente consiguen trabajo y si ya lo logran, no encuentran un parvulario donde acepten a sus hijos, ya que las plazas en éstos son insuficientes.
Además, en la mayoría de los casos los trabajadores que laboran a media jornada y reciben un salario reducido, por lo que tendrán también una pensión más baja cuando se jubilen, tienen que cumplir con el 80% aproximadamente del trabajo que hacen los trabajadores a plena jornada.