Tomáš Chalupa será el séptimo ministro de Medio Ambiente en dos años
Tal y como se venía especulando, el primer ministro Petr Nečas eligió al diputado y actual alcalde del distrito de Praga 6, Tomáš Chalupa, como nuevo ministro de Medio Ambiente, la silla más caliente del Gobierno.
Para el director del Centro para Asuntos Medioambientales, Bedřich Moldan, Chalupa no lo tendrá fácil en esta nueva etapa.
“Su experiencia como alcalde sin duda le ayudará en sus funciones de ministro, aunque la defensa del medio ambiente es una cuestión bastante más compleja y amplia que la política local. Pero de verdad espero que el nuevo ministro se haga bien con el control de su nuevo cargo”.
Los tres partidos de la coalición de Gobierno han expresado su apoyo y confianza en Tomáš Chalupa. Esperan que con él se calmen las aguas dentro del Gabinete que, con su antecesor, Pavel Drobil, han estado revueltas. El anterior ministro, situado en todo el centro de un escándalo de corrupción, tuvo que dimitir al igual que, entre otros, el presidente de la Policía, Oldřich Martinů, en una crisis política que enfrentó internamente al Gobierno tripartito y lo llegó a poner en la cuerda floja.El carismático Chalupa tiene una carrera política meteórica con solo 36 años y ningún escándalo a sus espaldas. Periodista, politólogo, historiador y también licenciado en Derecho. Buenas credenciales todas ellas, pero la oposición y los ecologistas desconfían de su nula preparación y experiencia en cuestiones medioambientales, como destacó Václav Zemek, el responsable de Medio Ambiente en el Partido Socialdemócrata.
“Por segunda vez en la corta historia del actual Gobierno, en el puesto de ministro de Medio Ambiente se coloca a alguien que no conoce el ámbito del Medio Ambiente y que no tiene ninguna experiencia en él”.
La oposición y ecologistas temen que una persona no ligada al medio ambiente sirva para dar luz verde a todos los proyectos que el Gobierno se proponga sin pensar en el impacto ecológico, acusación que hacen de los antecesores de Chalupa.El próximo ministro por su parte pide tiempo para hacerse con el control de una cartera, con la que efectivamente no está familiarizado. Pero se propone ya abordar los problemas de contaminación en el aire en las regiones afectadas por el esmog y la creación de una nueva ley para mejorar la protección del Parque Nacional de Šumava, en el sur del país. También quiere realizar una auditoría en el Fondo Estatal de Medio Ambiente antes de nombrar a un nuevo responsable que sustituya a otro de los damnificados de la crisis de Gobierno que le antecede. Y para todo ello, sabe Chalupa que se tiene que dar prisa, porque como recordó al aceptar su próximo nombramiento, la vida media de sus predecesores en la cartera ha sido de tan solo 118 días.