Simulacro de ataque terrorista en el metro de Praga
Decenas de socorristas, bomberos y policías participaron en la noche de jueves a viernes en un simulacro de ataques terroristas en el metro de Praga y en dos estaciones de ferrocarriles.
Policías, bomberos y socorristas llegaron al lugar de los hechos en 10 minutos, y acto seguido empezaron a salvar vidas y socorrer a los heridos. El director general del Cuerpo de Bomberos, Miroslav Stepán, expresó que estaba sumamente satisfecho con el trabajo realizado.
"Los diferentes equipos estuvieron muy bien coordinados, funcionaron a la perfección, los socorristas, los médicos, los bomberos todos trabajaron sin cometer errores, se trató de una acción de un alto nivel profesional".
El simulacro se llevó hasta los últimos detalles, a tal punto que los figurantes, que hacían de heridos como consecuencia de las fingidas explosiones en el metro, fueron trasladados a diferentes hospitales donde fueron sometidos a los trámites de rigor, como si se tratase de verdaderos heridos.
Los organizadores de los simulacros explicaron que se trató de una acción con varios escenarios. En la estación de ferrocarriles Praga-Holesovice explotaron bombas, se descubrió un paquete con explosivos y se detuvo a un supuesto terrorista, mientras que en Kralupy, en las cercanías de la capital, explotó un vagón de tren.
"Uno de nuestros objetivos fue medir y coordinar el tiempo de llegada de las diferentes unidades a los lugares de los hechos. Puedo decir que me siento satisfecho, porque se cumplió la meta establecida, aunque todavía deberá hacerse una evaluación a fondo", explicó el Ministro del Interior, Frantisek Bublan.
Fuentes del Cuerpo de Bomberos y de la Policía subrayaron que se trató del mayor simulacro de ataque terrorista realizado en la República Checa, y que en el lapso de dos horas y media se logró tener la situación bajo control.
Semejantes simulacros ayudan a coordinar el trabajo de los diferentes equipos que deben cooperar en caso de ocurrir una situación de emergencia.