Se reduce la presencia de antibióticos en los alimentos
La presencia de antibióticos en la carne animal sigue siendo un tema de preocupación en la República Checa, no obstante, la cantidad se ha reducido notablemente en los últimos años.
Es por ello que la Administración Estatal Veterinaria hace controles regulares sobre estos productos. Por ejemplo, el año pasado encontraron restos de antibióticos en la carne de seis tipos de animales de granja diferentes, aunque los casos se dan más en unos animales que en otros, como dijo para la Radiodifusión Checa el portavoz de la Administración Veterinaria, Petr Majer.
“Se ha encontrado especialmente en los órganos internos de cerdos y ganado vacuno. Esta situación lleva produciéndose mucho tiempo, y solemos encontrar entre 5 y 10 muestras que no cumplen los mínimos de las alrededor de 1000 que investigamos al año”.
Cuando esto sucede, normalmente se debe a que los ganaderos no han respetado el tiempo necesario entre la última toma de antibióticos y el sacrificio del animal, en otros casos, se debe a un mal uso de los antibióticos, cuando se le han suministrado al animal en exceso.
Pero no solo en la carne abundan los antibióticos. En otro producto animal, como es el caso de la miel, también se han encontrado restos de estos medicamentos, tal y como apunta Radoslav Pospíchal, de la Inspección Estatal Agrícola y Alimentaria.
“En 2015 hubo varios casos. De los 51 análisis que realizamos, 23 no fueron satisfactorios. Pero en 2018 analizamos nueve muestras de miel y todas eran adecuadas”.Aunque no todos los antibióticos tienen los mismos efectos sobre la salud humana, si su presencia en los alimentos no se controla, puede causar problemas.
Uno de los mayores problemas que enfrenta el ser humano en la actualidad respecto a los antibióticos es la resistencia a los mismos, ya que el abuso de los antibióticos hace que las bacterias sean cada vez más resistentes.
A pesar de todo, si comparamos la situación actual con hace diez años, la tendencia es positiva. En ese periodo, el uso de antibióticos en Chequia se ha reducido a la mitad. Pero todavía queda mucho trabajo por hacer, pues el país se sitúa en la mitad en la escala europea.
La regulación de los productos que contienen los alimentos que consumimos es un tema que a día de hoy depende en gran medida de las leyes que vienen del Parlamento Europeo.
Además de los antibióticos, también preocupan temas como el uso de pesticidas y herbicidas en las frutas y verduras.
Con algunas sustancias, como el glifosato, existe disparidad de opiniones entre la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria y otras instituciones, unos debates normalmente dificultados por el interés de algunos productores en esconder datos que comprometan su posición.Pero ocultar los estudios cuando no te favorezcan será más difícil desde el próximo año, nos cuenta el eurodiputado Pavel Poc.
“Desde el 1 de enero del próximo año esto no será posible. Por el contrario, se ha pedido que se haga una publicación proactiva de la información. Y habrá una sanción para los solicitantes que quieran ocultar los resultados de los estudios, es decir, si la información de un estudio no le conviene no puede esconderla, y si lo hace, recibirá una sanción bastante dura”.
Tras la aprobación de estas nuevas medidas, se espera que en el futuro se pueda reducir la presencia de sustancias nocivas en los alimentos, y que incluso se facilite la eliminación de aquellas cuya peligrosidad haya quedado demostrada en estudios científicos.