Regalan ropa de invierno a los refugiados para protegerlos del frío
Centenares de sacos con ropa de invierno han sido donados por los ciudadanos checos hasta el presente para ayudar a los inmigrantes de Asia y África a aguantar el frío europeo. A raíz del éxito de las primeras colectas públicas efectuadas en octubre, las organizaciones cívicas del país prosiguen en este tipo de ayuda, en vista del invierno que se aproxima.
Además de los gobiernos europeos, muchas organizaciones cívicas, incluidas las de la República Checa se esfuerzan por brindar ayuda a los refugiados. Tereza Špinková, de Praga, es una de las voluntarias que organiza colectas de ropa de invierno para adultos y niños, frazadas, tiendas de campaña y otros artículos de primera necesidad y los distribuye entre los inmigrantes en la frontera entre Serbia y Croacia, según dice.
“Esas personas con frecuencia ni saben dónde se encuentran, a qué fronteras han llegado y qué les espera en adelante. Llegan en autobús o a pie y no saben qué hacer. Además de repartir entre los inmigrantes vestimentas y otro tipo de ayuda, les ofrecemos la información de la que disponemos en ese momento para aliviarles un poco su situación”.En la frontera serbio-croata ofrecen su ayuda desde hace más de seis semanas más de 130 voluntarios checos. Tereza viajará a los Balcanes por segunda vez y está decidida a continuar en la organización de colectas públicas de ropa y dinero para los inmigrantes, y brindar también otro tipo de ayuda mientras sea necesario, según afirma.
”Hemos decidido ayudar en lo que podamos y viajar a los lugares donde más se nos necesite porque tenemos compasión con los inmigrantes de Asia y África. Nuestra convicción personal nos lleva a solidarizarnos con ellos. Además, nos molesta que en Chequia haya personas que critican y hablan mal de las personas que huyen ante los conflictos armados para salvarse la vida”.En Praga, así como en otras ciudades del país fueron creados centros provisionales de colecta pública a donde los ciudadanos pueden llevar en horas de la tarde durante los días laborales tanto ropa de invierno y frazadas como juguetes, utensilios escolares y también agua embotellada, jabones y otros productos de droguería.
Mientras tanto, en la localidad de Poštorná, en el sur de Moravia, se procedió al desmontaje del centro provisional para refugiados, formado por unas 20 grandes tiendas de campaña. Éste fue levantado a comienzos de septiembre con el fin de afrontar la esperada ola de refugiados, indica Petra Kučerová, portavoz del Ministerio del Interior.”En vista de que en octubre ha sido abierto un nuevo centro permanente para refugiados en Drahonice, y ha sido ampliada la capacidad en otras instalaciones de retención, las tiendas de campaña en Poštorná ya no hacen falta”.
Junto al área en el que habían sido instaladas y ahora desmontadas las tiendas de campaña para los refugiados se encuentra una antigua penitenciaría. Ésta será aprovechada ahora nuevamente para ubicar en ella a los reclusos. Los primeros veinte condenados a prisión deberían ser trasladados a la cárcel de Poštorná a mediados de este mes.