RCh introduce fuentes de energía renovables en zonas en vías de desarrollo
Establecer fuentes de energía renovables en países en vías de desarrollo será la aspiración de la asistencia checa al desarrollo durante la presidencia de la Unión Europea en el primer semestre del próximo año. Radio Praga conversó sobre el tema con Milan Smrž, presidente de la sucursal checa de la asociación europea para las energías renovables Eurosolar.
Un grupo de checos de la asociación europea Eurosolar y la organización humanitaria checa Adra realizaron un proyecto de electrificación en Masuku y Naluyanda, en Zambia. En las zonas rurales africanas instalaron paneles fotovoltaicos y una pequeña central eólica, de fabricación checa.
El próximo proyecto podría ser la creación de cooperativas energéticas, explica Milan Smrž.
“La idea es reforestar los terrenos quemados en las zonas más pobres con plantas aceiteras. Crearíamos pequeñas granjas familiares, y siempre cinco o seis granjas poseerían una prensa de semillas aceiteras que sería movida con energía solar o eólica. Así la gente obtendría un producto que podría ser utilizado para el consumo, para la fabricación de velas, jabón, o como combustible para cocinar o para la venta, porque el aceite es un artículo energético, que se vende siempre”.
Los pequeños cultivos serían combinados con la naturaleza original para impedir la explotación de grandes superficies con un monocultivo como ocurrió en Rusia y América. Milan Smrž subraya que las iniciativas de Eurosolar siempre se han basado en la cooperación con la comunidad local.
“Creamos, por ejemplo, un comité integrado por ciudadanos comunes, caciques… Muchas veces había sorpresivamente más mujeres que en el Parlamento checo. Este comité fue el socio con el que negociamos, le dijimos que necesitaríamos, que les enseñaríamos, etc. La cooperación fue muy buena, ellos lo aceptaron. Al principio nos miraron con un poco de desprecio, pero creo que disipamos la desconfianza”.
El proyecto de cooperativas energéticas fue presentado a la Comisión Europea, pero no fue aprobado, señala Milan Smrž.
“No sé por qué, habría que preguntar a la Comisión Europea. La verdad es que los proyectos checos no tienen mucho éxito también por el hecho de que aquí no existe un centro de asesoría que sea pagado por el Estado y donde uno podría consultar los proyectos, donde le aconsejarían qué reelaborar para que salgan aprobados. En Alemania funciona una oficina de este tipo. Abogo por su existencia también aquí, en la República Checa”.
El empeño checo por la introducción de fuentes de energía renovables en países en vías de desarrollo fue apreciado recientemente por el comisario europeo de Desarrollo y Ayuda Humanitaria, Louis Michel, durante su visita a Praga.