Praga, una ciudad sólo para ricos
Los precios de la vivienda en Praga aumentaron un 40% aproximadamente desde el año 2015, y cada vez menos personas pueden permitirse comprar un piso.
Mientras que en 2015 un apartamento de dos habitaciones situado bastante cerca del centro de Praga costaba unos 137.000 euros, actualmente su precio alcanza el doble. Por 137.000 se consigue comprar un piso de una sola habitación.
Los expertos indican que el problema radica en la oferta limitada, lo que se debe, por su parte, a los obstáculos que hay que superar a la hora de querer iniciar una nueva obra de construcción. Según afirma Dušan Kunovský, director de la compañía Central Group, la edificación de nuevas casas de vivienda está prácticamente paralizada por los prolongados procesos de concesión de los permisos.
El precio actual de una vivienda en Praga es de unos 3.300 euros por metro cuadrado. La suma final del apartamento está fuera de las posibilidades de la mayoría de los checos. Además, encarecieron las hipotecas y las condiciones para recibirla son mucho más duras a partir de abril de este año. El cliente debe pagar del bolsillo el 20% del coste del piso para obtener la hipoteca. Igual así, más de 82.000 personas han solicitado una hipoteca u otro tipo de préstamo para la vivienda desde comienzos de este año.