Policía checa se prepara para la cumbre de la OTAN

La policía checa aplicará todo el rigor de la ley contra los radicales que preparan manifestaciones masivas durante la cumbre de la OTAN, a celebrarse en noviembre en Praga. Además, a unos dos mil manifestantes les será prohibida la entrada al país.

Cumbre de la OTAN en Praga
El ministro del Interior, Stanislav Gross, prometió garantizar la seguridad de los participantes en la cumbre. En caso de que la policía no logre dominar la situación o se produzcan fallos, Gross está dispuesto a dimitir.

El presidente de la policía checa, Jirí Kolár, destacó que las medidas utilizadas contra los radicales serán mucho más duras que las adoptadas contra los adversarios de la globalización durante la sesión del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional en el año 2000. Según Kolár, la policía está decidida a utilizar contra los manifestantes gas lacrimógeno para impedirles el acceso a determinadas zonas de la ciudad.

Según apuntó Jirí Kolár, es difícil estimar el número de los radicales, pero debería oscilar entre los diez y los doce mil.

El alcalde de Praha Igor Nemec inspecciona la maguinária de seguridad antes de la cumbre de la OTAN,  Foto: CTK
"Entre los manifestantes, que serán tanto checos como extranjeros, predominarán los radicales de orientación antiglobalista. Tenemos informaciones de que otro gran grupo estará compuesto por extremistas e izquierdistas", dijo Kolár.

Las medidas concretas a ser utilizadas en los alrededores del Palacio de los Congresos, donde se efectuará la cumbre, son secretas. Sin embargo, se prevé que la vida de los ciudadanos y de las empresas, así como el tránsito vehicular en esa zona registrarán ciertos cambios.

En las operaciones en las calles de Praga participarán unos 12 mil policías, así como 2200 soldados. El directivo de la policía decidió invertir además más de un millón de euros para equipar a sus efectivos. La vestimenta y el correspondiente equipamiento de protección son indispensables para casos como éste, destacó el presidente de la policía checa, Jirí Kolár y agregó que la celebración de la cumbre será aún más complicada tomando en cuenta las amenazas del terrorismo internacional.