Pilsen sufre una humillante goleada en la cancha del Bayern de Múnich
Una goleada humillante tuvieron que tragarse los futbolistas del Viktoria Pilsen en la cancha del Bayern de Munich en la tercera jornada de la fase de grupos de la Liga de Campeones. Los checos cayeron por 0-5 sin enviar un solo tiro a la portería contraria.
La tercera jornada de la fase de grupos de la Liga de Campeones puso en evidencia la gran distancia que separa al ganador de la Champions League del campeón checo, según admitió el técnico del Pilsen, Pavel Vrba.
“La contienda demostró de manera obvia e inequívoca la diferencia que hay entre nosotros y el Bayern. El contrincante mereció la victoria de 5-0 y nuestro mejor jugador fue el arquero que paró varias otras ocasiones del rival. Así es la realidad, el Bayern dominó claramente en la cancha”, expresó.
La verdad que desde el pitido inicial, la contienda parecía un juego de gato y ratón. El Bayern prácticamente no les dejaba el balón a los jugadores del equipo checo, cuyo portero Matúš Kozáčik tuvo que hacer frente a un tiroteo letal por parte del equipo local, según indicó el hombre más ocupado del Pilsen.“La atmósfera del partido fue perfecta, el resultado menos, por supuesto. Pero es muy difícil jugar contra un rival tan fuerte. Ellos se crearon de verdad muchas ocasiones para marcar. En un partido parecido es importante aguantar el máximo tiempo posible sin recibir un gol y si lo recibes por lo menos tratar de no recibir otro. Ellos tiraron muchas ocasiones, pero igual nos metieron muchos goles”, dijo.
Ribéry abrió la cuenta de penal en el minuto 25 y Alaba aumentó las distancias antes del descanso, que dejó respirar un poco a los checos agotados.
Cuando ambos equipos se fueron al vestuario, la estadística demostraba la enorme presión alemana. El Bayern tiró 23 veces contra la puerta checa y tuvo una posesión del balón del 73%.
Estaba claro que en el segundo tiempo, los checos solo se esforzarían por no recibir una paliza aún más grande. Pero el Bayern quería seguir divirtiendo a los 60.000 hinchas que acudieron al Allianz Arena y no tuvieron compasión con el equipo de Bohemia Occidental. Ribéry y Schweinsteiger dejaron el marcador en 4-0 tras una hora de juego y Götz selló la clara victoria alemana en el último minuto.
En la próxima jornada, que se jugará el 5 de noviembre, el Pilsen recibirá al gigante alemán en casa. Y si bien, en vista de lo ocurrido en Múnich, no se atreve pensar ni siquiera en el empate, espera enviar por lo menos un tiro a la puerta contraria y poner a prueba la defensa alemana.
El Bayern sigue liderando el grupo D, con nueve puntos. El Pilsen sigue siendo colista, con cero. En el segundo partido, el CSKA Moscú sucumbió en casa por 1-2 ante el Manchester City, que se posiciona en segundo lugar.