Disminuye la criminalidad juvenil en el país
La criminalidad juvenil ha disminuido en los últimos años en la República Checa. Así se desprende de un estudio hecho por la Unión de Jueces y la Universidad de Pilsen.
A pesar de que los medios de comunicación con frecuencia traen imágenes de delincuentes menores de edad, la criminalidad juvenil va en descenso en el país, señaló el presidente de la Unión de Jueces de la República Checa, Libor Vávra, en rueda de prensa.
“El número de delitos juveniles, al menos los descubiertos, ha disminuido durante los últimos diez años. Nosotros intuíamos este fenómeno desde hace algún tiempo y hace poco lo comprobaron los resultados de la investigación realizada en la Universidad de Pilsen”, sostuvo Vávra.
Del estudio se desprende que el número de robos y hurtos protagonizados por jóvenes, los delitos más frecuentes entre menores de edad, se ha reducido en un 70 por ciento en los últimos siete años. Mientras que en el año 2000 se registraron en el país 17.700 hurtos cometidos por niños y jóvenes menores de 18 años, en 2007 fueron sólo 5.500.Según la profesora Helena Válková, de la Universidad de Pilsen, los motivos son varios. Uno de ellos puede ser que hace seis años, se elevó el límite de daños monetarios para calificar el caso como un delito, de los 80 a los 200 euros, aproximadamente. “Influyó también el cambio del clima social y la introducción de tribunales especiales para menores de edad”, afirmó Válková.
Sin embargo, la psicóloga Tereza Sejkorová, advirtió sobre la creciente gravedad de las infracciones cometidas por niños y jóvenes y el aumento de la violencia juvenil.
“Según mi opinión, ha cambiado la estructura de la delincuencia infantil y juvenil. No es que haya más delitos cometidos por niños y jóvenes, sino que se vuelven cada vez más graves y violentos”, destacó Sejkorová.En relación con la criminalidad juvenil se discute también la edad mínima de la responsabilidad penal de menores. Algunos jueces proponen reducirla de los actuales 15 a los 14 años. Según Libor Vávra, tal medida no tiene sentido.
“Da igual si la edad límite de la responsabilidad penal es de seis o de 26 años. Lo importante es que el Estado tenga instrumentos para educar y castigar a los delincuentes menores, para que éstos no vuelvan a cometer infracciones en su edad adulta”, recalcó Vávra.
Los resultados de la investigación realizada en la Universidad de Pilsen responden a los de otros países europeos. Llama la atención sólo el consumo elevado de alcohol entre los jóvenes checos y el creciente número de acosos a estudiantes de enseñanza primaria, concluyó la profesora Helena Válková.