Tres soldados heridos en un ataque a la base checa en Afganistán
Tres soldados fueron heridos durante un ataque a la base de la República Checa en Afganistán, dos de ellos de gravedad. Precisamente también víctima del terrorismo islámico murió este sábado el embajador checo en Pakistán, durante un atentado al hotel donde se alojaba. Sus restos mortales ya han llegado a Praga.
El personal sanitario pudo reaccionar rápidamente y estabilizar a los heridos, como nos cuenta la jefa de prensa del estado mayor general, Jana Ružičková
“Todos recibieron primeros auxilios en el mismo lugar, pero dos se encontraban en estado grave y fueron trasladados en helicóptero al hospital de campaña estadounidense de Bagram. El tercero permanece bajo cuidados médicos en la base de Shank.”, explicó.
Los dos heridos graves permanecen estables y en los próximos días serán evacuados a la República Checa. Con estas ya son doce las bajas checas en Afganistán, si sumamos los dos muertos y siete heridos del año pasado. El ataque se produjo un par de días después de la muerte del embajador checo en Pakistán, Ivo Žd’árek, como consecuencia del atentado terrorista al hotel Marriott de Islamabad.
El cuerpo del embajador llegó este lunes a Praga. Los restos mortales de Žd’árek fueron recibidos por sus familiares y por una delegación oficial formada por el presidente de la República, Václav Klaus y el primer ministro checo, Mirek Topolánek.El presidente recordó el importante papel que cumple el personal diplomático del país.
“Con esto se pone en evidencia que el embajador se encuentra en la primera línea en la defensa de nuestros intereses en el mundo, y que se trata de una primera línea muy peligrosa. En Afganistán se ha demostrado que se trata de un asunto sumamente serio”, recalcó.
A pesar de los recientes acontecimientos, la República Checa no se plantea cambiar su política en Oriente Medio. El Ministerio de Defensa ha anunciado que no se retirarán tropas de Afganistán y que, al contrario, será necesario incrementar su número.
Los soldados checos que operan en la provincia afgana de Lógar colaboran en la reconstrucción de la zona, que actualmente se encuentra entre las más virulentas. Precisamente en las zonas conflictivas de Afganistán es donde Al-Qaeda recluta terroristas suicidas como los que atentaron el sábado contra el hotel Marriott.