Tarjeta amarilla en el Partido Socialdemócrata para David Rath
La llamada de atención que el líder socialdemócrata le ha dado al responsable de Sanidad del partido, David Rath, la fuga de médicos checos al extranjero o la bajada del precio de los automóviles son algunos de los temas de la prensa checa de este viernes.
David Rath es el responsable socialdemócrata de sanidad y una de sus figuras más visibles y polémicas, al liderar la campaña contra los pagos por servicios médicos. El periódico recoge las declaraciones de Paroubek, quien comenta sobre Rath, que “debe dejar de lado los asuntos controvertidos”.
Y es que, según el diario, en la formación se teme que Rath pueda perjudicar la imagen de los socialdemócratas junto antes de las elecciones. Mladá Fronta Dnes recuerda además que un colaborar de Rath, Filip Bušina, ha sido acusado recientemente de evasión de impuestos.
Por su parte, Lidové Noviny comenta el último estudio del Ministerio de Educación sobre los alumnos de etnia gitana. El 25 por ciento de los niños gitanos se halla matriculado en una escuela especial, destinada a alumnos de menor rendimiento. Solo el dos por ciento de los niños no gitanos acude a este tipo de centros.
Según la viceministra de Educación, Klára Laurenčíková, el principal problema de esta situación es que las escuelas especiales están pensadas para niños con retraso mental y no para estudiantes con problemas de marginación social.
El diario gratuito Metro advierte en primera plana de la emigración de médicos checos al extranjero. Según informa el periódico, cada año se va a trabajar a otros países una cuarta parte de los recién egresados. De hecho, en 2008 se graduaron casi 800 médicos y 260 decidieron ejercer en el extranjero.
Según el Colegio de Médicos checo los jóvenes licenciados en medicina se enfrentan a malas condiciones de trabajo y de estudios de posgrado. Solo como ejemplo, una estancia de hospital obligatoria al terminar la carrera se paga en la República Checa a 600 euros al mes. En la vecina Alemania podría recibir más de 2.000 euros.Por último, Hospodářské Noviny dedica un reportaje a los precios de los automóviles, que en la República Checa son ahora los más bajos de la historia, según el rotativo. Según datos recabados por la Comisión Europea, en 2008 se redujeron en el país los precios reales de los autos un 13 por ciento, lo que supone la mayor bajada de toda la Unión Europea.
Por ejemplo, el modelo más barato en la actualidad, el Chevrolet Spark, cuesta 6.300 euros, lo mismo que en 1992 costaba el Škoda Favorit. Solo que en ese año el sueldo medio en la República Checa era de 150 euros y ahora de 800.
Aun así en la mayor parte de los casos sigue siendo más barato comprarse el automóvil en el extranjero, sobre todo, y paradójicamente, en cuanto a la marca checa Škoda. Por ejemplo, el Škoda Fabia cuesta en Chequia 9.400 euros, en Francia 8.100 y en Gran Bretaña 7.200.