Torta salada

Foto: Jana Šedá
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En los últimos años nos vemos expuestos en forma permanente a un sinnúmero de campañas que propagan la alimentación sana. Pero son muchas las personas que prefieren ser gordas antes que dejar de comer sabrosos pasteles por ejemplo. En Cocinamos con Radio Praga trataremos de convencerlos esta vez de que las tortas no siempre representan un peligro para los consumidores que quieren mantenerse delgados.

Hola amigos, nuevamente estamos con ustedes para enseñarles algo de lo que se cocina en la República Checa.

Esta vez prepararemos una torta salada que, a decir verdad no es muy checa, pero está de moda actualmente entre las amas de casa de este país.

Para prepararla vamos a necesitar: pan de molde de dos colores, es decir de harina blanca y de harina de trigo integral. Bueno, basta con el blanco, pero el resultado es más bonito cuando es de dos colores.

Para el relleno utilizaremos queso fundido, digamos 200 gramos, ajo al gusto, un poco de mayonesa, quesito crema o requesón, unos 50 gramos de mantequilla y especias, o hierbas.

Primero haremos el relleno: en un recipiente mezclaremos el queso fundido, la mayonesa y el ajo, podemos agregar pimentón fresco verde o rojo picado fino y ajo al gusto.

En otro plato mezclaremos el queso crema con mantequilla y perejil u otra hierba aromática o se puede agregar polvo curry, así como cualquier otro sabor que sea de su gusto.

Foto: tinpalace / Stock.XCHNG
Ahora ya procedemos a hacer la torta. Ponemos cuatro rodajas de pan de molde de manera que formen un cuadrado y las untamos con uno de los quesos. Sigue otra capa de pan, preferiblemente de otro color y el otro queso. Así seguimos unas cinco o seis capas.

Para hacer gala a la elegancia, cortaremos ahora los bordes, de manera que los lados queden lisos, los untamos con el queso que sobró más y por cada lado pegamos dos rodajas de pan. Ahora podemos cubrir toda la torta con una de las pastas de queso y adornar el pastel salado a gusto.

Aquí las posibilidades son prácticamente ilimitadas. Por ejemplo se pueden cubrir los bordes con zanahoria rallada y arriba se pueden colocar flores hechas con tomates y perejil.

Foto: Jana Šedá
Lindos y sabrosos adornos se hacen también de pepinos combinados con pimientos de varios colores, y así podríamos continuar.

También es posible derretir queso eidam, estirarlo con un rodillo y cubrir toda la torta como si el queso fuera mazapán, y sólo después adornar la superficie. En fin, como dijimos, las posibilidades son enormes.

Al igual como para los rellenos, pues quien prefiere pescado, puede hacer un relleno de atún, queso crema y cebolla picada fina, etce, etc.

Lo importante ahora es dejar la torta unas horas en el frío para que adquiera una consistencia más firme. ¡Buen provecho!

Y eso es todo por hoy. Nos despedimos hasta el próximo capítulo de Cocinamos con Radio Praga.