Xavier Baumaxa, cantautor deslenguado e irreverente
Armado con una guitarra y letras inteligentes, ágiles y de un humor muchas veces corrosivo, Xavier Baumaxa entró en la escena musical checa como una especie de cantautor punk. Ahora, con cinco discos a sus espaldas y una imagen consolidada de poeta y mal bicho, Baumaxa emprende una nueva dirección musical junto a la orquesta Hněddý Smyčky.
Baumaxa tocó por primera vez la guitarra en directo a los once años, cuando todavía se llamaba Lubomír Tichý, empeñado quizás en desdecir su apellido, que en checo significa “silencioso”. A los 14 ya había fundado un grupo de folk rock con compañeros de colegio en su Most natal, por cierto la peor ciudad para vivir del país por sus altos niveles de desempleo, marginación e inseguridad, según recientes estudios sociológicos.
Además de las consabidas juergas y la supuesta experiencia, estos años de relativa invisibilidad le sirvieron a Baumaxa para conocer al poeta vanguardista ucraniano Em Rudenko. El escritor no solo se convirtió en un buen amigo de Baumaxa, que colabora con él hasta la actualidad, sino que en su momento compartieron actuaciones y desarrollaron juntos una forma de expresión poética particular, rica en juegos de palabras, parodias de otros géneros y referencias a la cultura pop. Una forma de escribir que hoy día es sello de la casa de Baumaxa.
A los 29 años, posiblemente en medio de una galopante crisis artística, Baumaxa abandonó la idea de salir al escenario con una banda y da comienzo a su faceta de cantautor. Conocido como el “bardo de las perversiones”, empieza a cosechar fama colaborando con la cantante Eva Pilarová y participando junto a Rudenko en calidad de dúo presentador de festivales como el de Litvinoff o el de Trutnoff.
De esta época es por ejemplo ‘Cebolleta’ (‘Pažítka’). Traficas experiencias, traficas con todo lo que se puede. Saquitos de cebolleta seca, eso es lo que se llama buen humor.
A la pobreza instrumental de los primeros discos le sigue una etapa iniciada con ‘Retrofuturo’ en 2007, con mejores arreglos, más presencia instrumental y de composición más valiente.
El resultado se llama ‘Coveranto’ y consiste en cinco canciones nuevas y diez antiguas, de su etapa de cantautor más puro, vueltas a interpretar con los Hněddý Smyčky y en general mucho más ricas y complejas que en su versión primitiva.
Y les dejamos con una muestra. Esto se llama ‘Los Artistas’ (‘Umělci’) y cuenta con la colaboración de dos reconocidos cantantes checos: Dan Bárta y Matěj Ruppert.
