Argentina, primer rival checo en mundial de basquetbol femenino
El mundial de basquetbol femenino regresa tras 43 años a la República Checa. El campeonato será inaugurado este miércoles por la noche en una gala con fuegos artificiales efectuada en la ciudad de Brno. La selección checa se estrenará en el torneo al día siguiente contra la selección argentina.
“Estoy convencido que todos nos damos cuenta de que se trata de un mundial y que debemos trabajar juntos, en equipo, para lograr un buen resultado. Deseamos ser exitosos, ese era el único criterio a la hora de hacer la lista de jugadoras”.
El seleccionador cerró la convocatoria de doce jugadoras este lunes, cuando tachó de la lista dos últimos nombres: Romana Hejdová y Michaela Hartigová.
“Romana Hejdová tuvo problemas de salud durante la última semana. Además, he preferido a Edita Šujanová en vez de Michaela Hartigová, ya que representa el tipo de jugadoras que necesitamos. Es decir, una jugadora capaz de salir a la cancha durante un partido difícil y en dos minutos rendir al máximo”, explicó el técnico.Argentina será el primer contrincante de las checas en la primera fase del campeonato. Juego agresivo y rápidos contragolpes, eso son los mayores fuertes de la selección latinoamericana, según el técnico checo.
“Además, es necesario tener paciencia a la hora de atacar la canasta argentina y aprovechar al máximo los 24 segundos para tirar”, mencionó el entrenador.
Lubor Blažek agregó que las checas luego deberían derrotar este viernes también a las favoritas rusas, subcampeonas mundiales, si quieren pensar en el pase a la siguiente fase del campeonato. “No cabe duda de que Rusia es un equipo muy fuerte. Por otro lado, suele tardar en entrar en calor, de meterse en los campeonatos”, indicó el técnico del cuadro checo que este sábado se medirá, además, con Japón en su último partido del grupo D.En caso de clasificar a la segunda fase del campeonato, el combinado nacional toparía con los tres mejores equipos del grupo C, integrado por Brasil, España, Corea del Sur y Mali. Las esperanzas de la hinchada local son grandes, las entradas para los partidos protagonizados por las checas ya se han agotado. El combinado nacional jugará en la Sala Municipal de Deportes de Brno, con una capacidad de 3.500 plazas.